El Golf es un auténtico referente dentro de su categoría. En este caso, probamos una versión que puede ser interesante para muchos usuarios. Lo es porque combina un buen motor Diésel de bajo consumo y excelentes prestaciones, con un cambio un cambio DSG de 6 velocidades magnífico y un chasis más deportivo que nos permite disfrutar mucho al volante.
Un habitáculo muy bien acabado
Si empezamos con el análisis de este coche, empiezo con su interior. Como cabe esperar en un Golf, no hay sorpresas. El interior sigue la línea marcada por la anterior generación. Así que, nada de tonterías; la sobriedad manda y todo tiene un diseño impecable. Si analizamos los acabados, hay que decir que están al nivel esperado, gracias a los buenos materiales empleados y a un ensamblaje cuidado en todas las piezas, al menos las que encontramos a la vista.
Pero dejando a un lado la buena realización del interior, lo mejor del Golf es que te sientas y parece que te lo han hecho a medida. Es ponerse a los mandos, y ver como el asiento se amolda perfectamente al cuerpo para que te sientas integrado en el coche desde el primer momento. A poco que tiremos de reglajes para ajustar asiento y volante, encontramos la postura adecuada para conducir con comodidad y, de esta manera, disfrutar de la conducción sin que los kilómetros y el tiempo no pasen factura de forma desagradable.
El ‘puesto de mando’ del conductor se caracteriza por ser claramente más espacioso y ofrecer una ergonomía nuevamente perfeccionada. Especialmente los conductores de gran estatura agradecerán la posición del asiento que ha sido desplazada hacia atrás en 20 mm; al mismo tiempo se ha adaptado, como es natural, el área de ajuste de la dirección. Gracias a la Plataforma Modular Transversal MQB también se han optimizado las distancias entre los pedales; el espacio entre el acelerador y el pedal del freno, por ejemplo, ha aumentado en 16 mm. También se ha modificado la posición de la palanca de cambios en 20 mm; gracias a esto, el pomo de la palanca de cambios queda más al alcance de la mano.
Gracias a que el Golf ha crecido ligeramente en longitud, anchura y la batalla, así como los anchos de rueda optimizados, el habitáculo es algo más espacioso. Todo esto se traduce en un aumento en las plazas traseras, por lo que hay mayor amplitud para las piernas y también para los hombros.
De todos los mandos, destaca la gran pantalla táctil de infoentretenimiento de ocho pulgadas que nos muestra mucha información y los sistemas de infoentretenimiento –todos ellos son de nuevo desarrollo y diseño-. Además, por primera vez, Volkswagen equipa el Golf con una generación de pantallas táctiles con sensor de proximidad y una función que reacciona al movimiento de barrido los dedos y al zoom de forma similar a un Smartphone. Su funcionamiento es impecable.
Una conducción de calidad
Conducir el nuevo Golf sigue siendo un placer que no está al alcance de ningún coche de su segmento, salvo el Audi A3, BMW Serie 1 y SEAT León. Si por la suavidad de sus puertas y el nivel de acabados de su interior es un coche que transmite calidad desde el primer momento, lo mismo ocurre cuando arrancamos el motor. Atrás quedaron aquellos TDI toscos, ruidosos y hasta desagradables de conducir, ahora encontramos una motorización muy refinada que responde con suavidad en todo su margen de giro.
El puesto de conducción está tan bien diseñado, que uno se siente cómodo a los mandos desde el primer momento. El volante, aunque no es completamente redondo, se maneja a la perfección, está forrado con un tapizado de cuero muy suave y agradable y transmite bastante solidez. Además, está muy bien equipado con diferentes mandos para controlar funciones como el regulador de velocidad, equipo de sonido y el teléfono, entre lo más destacable.
El tacto de todos los mandos (Dirección, pedales y cambio) transmiten calidad y precisión, algo que redunda muy positivamente en el agrado de conducción.
Durante los primeros metros, la dirección tampoco puede ocultar su precisión y excelente funcionamiento, por lo que me dispongo -lleno de impaciencia- a buscar una carretera para ver como va este Golf. El rodar del Golf transmite aplomo. Se nota desde el primer momento que es un coche decidido que sigue muy fielmente la línea que le marcamos. Sirva como ejemplo que, circulando en línea recta, apenas hay que hacer correcciones para que el coche avance. Ya en curva, bien en lentas o en rápidas, este Golf se inscribe fielmente a la trazada que le marca el conductor. Hay que reconocer que la suspensión deportiva le viene como anillo al dedo a este coche.
También es un coche estable y aplomado cuando se trata de frenar a altas velocidades –ya sea en recto o con una desviación de la trayectoria-. Al mismo tiempo, lo perdona todo, resulta predecible y te hace muy buen conductor. Vamos, que no sólo es un coche que resulta escrupulosamente preciso en los giros, divertido cuando llegan las curvas y muy fácil de conducir, sino que también es seguro y 100% razonable para el día a día.
Selección de perfiles de conducción
Volkswagen ofrece, por primera vez, selección de perfiles de conducción para el Golf; se trata de un instrumento mediante el cual los conductores pueden modificar parametros del vehiculo para adaptarlos a su estilo de conducción de la forma más eficiente. En total, hay disponibles cuatro programas de conducción y, en combinación con el Sistema de Suspensión Adaptativa Electrónica ‘DCC’, cinco programas: Eco, Sport, Normal, Individual y con el sistema ‘DCC’ también el programa Comfort. El perfil de conducción ‘ECO’ regula el consumo óptimo del motor, del climatizador y otros grupos auxiliares. Además, los automóviles equipados con ‘DSG’ disponen de una función de “navegación” en el modo 'ECO': cuando el conductor levanta el pie del acelerador, por ejemplo cuando se aproxima a un semáforo en rojo o en trayectos con pendientes, el 'DSG' se desacopla y el motor marcha en vacío. De este modo, la energía cinética del Golf puede utilizarse de forma óptima adaptándose al estilo de conducción correspondiente.
Pero si el chasis está cargado de tecnología, además de contar con una buena puesta a punto, el motor no iba a ser menos. El Diésel 2.0 TDI de 150 CV se acopla de maravilla al Golf para encontrar un coche equilibrado, que sea capaz de ofrecer muy buenas prestaciones y un consumo más que ajustado.
Lo que más me sorprendió es lo rápido que sube de vueltas, además de ser un motor bastante plano y progresivo. Si hablamos de rendimiento , hay que destacar que el margen de utilización es muy amplio, ya que desde las 1.750 rpm la respuesta es muy buena y se mantiene contundente hasta las 4.000 rpm. En todo ese recorrido, no se perciben baches en la entrega y el motor gira con bastante alegría.
En cuanto al consumo de carburante no hay sorpresas. Desde el primer momento se nota que este coche gasta poco. En nuestro caso, circulando a un ritmo normal en el que no buscábamos una conducción eficiente, obtuvimos un consumo ponderado de unos 6,5 l/100 km, lo que es un muy buen dato. A un ritmo más alegre, en el que buscamos la máxima aceleración posible del motor, alcanzamos los 8 litros de media.
El cambio DSG de 6 velocidades saca lo mejor de sí cuando se le asocia a este motor. Sin duda, es un plus adicional para disfrutar de la conducción, ya sea para ir tranquilo, o para disfrutar de las curvas a un ritmo ágil. Tanto para bajar, como para subir marcha, es una caja que responde con inmediatez para que puedas manejarla de forma manual sin problemas.
Con este motor y caja de cambios, es cierto que el Golf no es excesivamente rápido, pero tampoco es un coche lento, pues es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 8,6 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 212 km/h.
Un equipamiento repleto de ayudas a la conducción
Una de las grandes novedades del nuevo Volkswagen Golf, es toda la retahíla de ayudas a la conducción que hace que todo sea mucho más fácil al volante. Algunos de los nuevos asistentes de conducción son el freno anti colisiones múltiples, hasta ahora solamente utilizado exclusivamente en todo el mundo por el Grupo Volkswagen y por primera vez de serie para el segmento de los compactos, un sistema proactivo de protección de ocupantes Pre Crahs, el Diferencial Electrónico de Deslizamiento Limitado ‘XDS’ (introducido con el Golf GTI), el Sistema de Control de Velocidad de Crucero Adaptable ‘ACC’ con ‘Front Assist’, el asistente de frenada de emergencia automática en ciudad, el asistente de cambio de carril “Side Assist”, el asistente de mantenimiento de carril “Lane Assist”, el sistema detector de fatiga y la última generación del asistente de estacionamiento automático “ParkAssist”, incluido el Sistema de Aparcamiento Óptico ‘OPS’ (representación de 360 grados) y los sistemas de iluminación adaptativa avanzados ‘Light Assist’ y ‘Dynamic Light Assist’.
A estos sistemas se le añaden nuevas tecnologías como la dirección asistida progresiva (optimización de la dinámica y mejora del confort), una selección de perfiles de conducción con cinco programas (“Eco”, “Sport”, “Normal”, “Individual” y, en combinación con el sistema ‘DCC’, también el programa “Comfort”), el freno de estacionamiento electrónico, un asiento deportivo ergonómico de nuevo diseño (ergoActive), un sistema de protección contra el aprovisionamiento de combustible erróneo para diésel y una nueva generación de sistemas de infoentretenimiento.
Precio y rivales
El Volkswagen Golf R-Line 2.0 TDI CR 150 CV Bluemotion DSG de 6 velocidades está disponible desde 29.290 €, un precio que se ajusta perfectamente a la calidad que ofrece un coche de esta categoría (ver todos los precios). El equipamiento opcional es amplio, pero no incrementa demasiado el precio final, sobre todo si lo comparamos con otros modelos de la competencia, como el BMW Serie 1 y Mercedes-Benz Clase A.
Conclusión: El Golf nos encanta. Es un coche fantástico que cumple con nota a todos los niveles para ser el mejor coche de la categoría, y uno de los mejores del mercado. La versión Diésel de 150 CV asociada a la caja de cambios de doble embrague de 6 velocidades y al acabado deportivo R-Line, permite encontrarnos un coche de corte deportivo, pero perfectamente válido para el día a día gracias a su bajo consumo y confort de suspensión.