El nuevo SsangYong Korando va a marcar el inicio de una nueva etapa dentro de la firma coreana, en la que aparecerán nuevos productos más modernos y avanzados. Además, se suma con aires renovados a la pléyade de modelos que inundan el sector de los SUV medios. Para contarte todos los detalles de este nuevo todoterreno, decidimos probar la versión de tracción total asociada a un cambio manual de seis velocidades y al acabado Limited. Esta variante se puede adquirir por 27.490 € (ver todos los precios).
Después de probar el nuevo Korando, confieso que me ha gustado en líneas generales, ya que se desenvuelve muy bien en todos los terrenos (mucho mejor en carretera que en campo), tiene un buen número de soluciones bastante prácticas, su interior es amplio, ofrece una buena relación calidad-precio-equipamiento y tiene un tacto de conducción agradable.
Calidad y acabados
El interior tiene una buena calidad percibida y los ajustes son correctos. Todo el habitáculo está terminado con plásticos duros al tacto, con buen ajuste entre piezas y sin fallos demasiado evidentes. No obstante, hay algunos plásticos que tienen una apariencia que desentona con el conjunto final. Por ejemplo, la diferencia entre el plástico de la parte superior del salpicadero, bien terminado, no acaba de casar con el de la consola que imita al aluminio, de un aspecto similar al que podemos encontrar en cualquier prototipo o preserie. Es algo fácilmente mejorable.
Las puertas están acabadas con un panelado de una pieza que está coronado con un guarnecido de un textil similar al cuero para la zona del reposabrazos. El anclaje y el ajuste de estas piezas, tanto en las plazas delanteras como las traseras, es bueno, ya que al poner la música alta, no vibran casi nada. Los paneles de las puertas delanteras integran unas luces de cortesía en rojo que suponen un plus de seguridad cuando tenemos las puertas abiertas en zonas muy oscuras (ver imagen).
La iluminación del interior es bastante correcta. Hay dos plafones en el techo -ver imagen 01 y 02- y los parasoles tienen luces de cortesía -ver imagen-). Por su parte, la del maletero es escasa. Los espejos retrovisores tienen luces de cortesía con LED luminosos (ver imagen).
Habitabilidad interior y asientos
El SsangYong Korando tiene un habitáculo homologado para cinco ocupantes (ver imagen). El nivel de habitabilidad es bueno en todas las plazas.
Los asientos delanteros son muy cómodos y, en el caso de nuestra unidad de pruebas, estaban forrados en un cuero de grano fino que tenía un tacto agradable. Sin ser unos asientos muy envolventes y con un cuero muy suave, recogían bien el cuerpo sin apenas resbalamiento. Los reposacabezas quedan cerca de la cabeza y tienen regulación en altura y profundidad –a mí me hubiera gustado que la regulación en profundidad fuera un poco más amplia, no obstante, mejora a otras marcas que sólo lo tienen en altura- (ver imagen).
Los asientos de las plazas traseras son de diseño plano, tanto por banqueta como por respaldo. Al ser tan planos, facilitan mucho el acceso al interior y ayuda a que los ocupantes puedan moverse sin problemas de una plaza a otra.
Los reposacabezas traseros, al igual que los de las plazas delanteras, quedan cerca de la cabeza. Tienen forma de coma y únicamente se pueden regular en altura (ver imagen).
El respaldo cuenta con varias posibilidades de inclinación que permite que los ocupantes puedan encontrar una postura más confortable durante los largos desplazamientos (ver imagen). Éste, es un detalle que no se suele ver en la mayoría de los coches.
En el respaldo de la plaza central hay un apoyabrazos con dos posavasos integrados que se puede ocultar y que resulta confortable (ver imagen). Sería perfecto si se pudiera regular en varias posiciones, ya que cuando lo abrimos, puede quedar demasiado bajo para algunos ocupantes.
En las plazas traseras, el piso está demasiado cerca respecto a la banqueta, lo que provoca que las piernas de los ocupantes de las plazas traseras vayan demasiado encogidas. No me ha resultado demasiado incómodo, aunque va en función de gustos y de complexiones, ya que los ocupantes más altos si notarán mayor incomodidad. Lo que sí es de agradecer, es que el piso es completamente plano, un detalle a valorar en un coche de tracción integral.
El puesto de conducción es cómodo ya que, tanto el asiento como el volante, ofrecen amplios reglajes para encontrar la postura adecuada con facilidad. Además, el resto de mandos de control (pedales y cambio) también están bien ubicados.
Entre los dos asientos delanteros hay un pequeño cofre disfrazado de apoyabrazos que queda demasiado bajo para que los brazos descansen adecuadamente cuando llevamos mucho tiempo conduciendo (ver imagen).
Mandos: disposición y funcionamiento
Todos están bien ubicados y la sencillez de uso es lo que prima por encima de todo. Tenemos los mandos justos y necesarios para manejar las diferentes funciones con rapidez.
El volante tiene un tamaño y grosor muy bueno. Está forrado en cuero y tiene un tacto agradable. Integra los típicos mandos que nos permiten controlar el equipo de sonido y el teléfono. Precisamente, sobre los mandos, vemos una única pega; no podemos cambiar las emisoras que tenemos preseleccionadas, únicamente podemos buscarlas (ver imagen). Así que, para cambiar de emisora, hay que apartar las manos del volante para seleccionarla desde la pantalla multifunción de la consola o desde un mando a distancia.
Detrás del volante están los típicos mandos satélite que sirven para accionar los indicadores de dirección, las luces (ver imagen), los limpiaparabrisas (ver imagen) y el regulador de velocidad (ver imagen). Todos tienen una buena ubicación y un tacto suave y preciso.
A la izquierda del salpicadero hay unos mandos dedicados para bloquear el diferencial, desconectar el control de estabilidad –parcialmente-, regular la altura de las luces de carretera y encender las antiniebla (ver imagen). El tacto de todos ellos es correcto.
En la consola hay cuatro botones agrupados que permiten desempañar el parabrisas y la luneta trasera, consultar los datos del ordenador de bordo y encender las luces de emergencia (ver imagen). Todos tienen un tacto suave cuando los pulsas pero son algo imprecisos.
El mando a distancia para abrir el vehículo está integrado, como todos los coches actuales, en la llave de contacto (ver imagen). Lo que menos me ha gustado es que los botones que permiten cerrar y abrir el coche están excesivamente duros.
Equipo de sonido, navegador y sistema de climatización
En la parte superior del salpicadero hay una pantalla multifunción de 6,2” con las siguientes funciones: sistema Bluetooth para el teléfono y audio, navegador con Windows CE y cartografía iGo 8, Radio/CD/MP3, DVD/DVD-R/RW, DVD+R/RW/VCD, Radio con RDS, Lector de tarjetas SD y un puerto USB con conexión Ipod. Adicionalmente, también se puede instalar un sistema de televisión y la cámara de visión trasera como ayuda al estacionamiento (ver imagen).
El equipo de sonido ofrece una calidad buena. Podemos gestionar todo tipo de archivos e, incluso, escuchar canciones vía bluetooth a través del teléfono móvil. Únicamente tenemos una pega, y es que, si queremos escuchar un archivo de sonido vía bluetooth, no podemos activar el sistema de navegación.
También se pueden ver vídeos o películas a través del DVD –desde el puerto USB no lo hemos conseguido-. Para ver estos vídeos, tenemos que estar con el coche estacionado y el freno de mano accionado.
Además de ver vídeos, también podemos ver fotografías, aunque, en este caso, la navegación se hace más complicada -si tenemos un USB con fotos almacenadas en carpetas, la lectura de las mismas se complica por momentos, como consecuencia de las limitaciones del procesador y de la memoria interna de este tipo de dispositivos.
Hay gran variedad de conectores para asociarlos a dispositivos externos; hay una cable para conectar un ipod o iphone en la parte superior de la consola (ver imagen) y dos tomas microUSB y Jack integradas en la pantalla multifunción. Si queremos conectar un dispositivo por vía USB, tendremos que conectar un adaptador para ello (ver imagen). En general, parecen soluciones poco sofisticadas e integradas, pero se agradece mucho toda la variedad de conexiones que se ofrecen.
Nuestra unidad equipaba -de serie- un sistema de navegación iGO 8 que es una maravilla por lo completo que es y lo barato que resulta (unos 400 €). Ofrece mucha información y los mapas de un total de 43 países, en los que se incluye todo el continente europeo.
Los mapas están obsoletos, ya que son de 2009, no obstante, el iGO 8 se puede actualizar muy fácilmente e incluir nuevas funciones como, por ejemplo, la base de datos de radares. Al igual que la mayoría de navegadores, se pueden localizar puntos de interés (POIS) de hospitales, aparcamientos, alojamiento, tiendas, centros comerciales, gasolineras, áreas de descanso, cajeros automáticos y los restaurantes más cercanos a la ruta que le marquemos. La base de datos de iGO 8 es de las más completas.
El navegador dispone de cartografía en 3D y muestra los edificios más emblemáticos de las ciudades. La interfaz gráfica y la voz que nos guía es muy mejorable, ya que parece generada por un modulador. Una de las primeras actualizaciones que debemos hacer, es cambiar la voz por otra más agradable, de las muchas que podemos encontrar para el iGO 8.
Para facilitar, en la medida de lo posible, el manejo del navegador y el equipo de sonido, hay un mando a distancia por infrarrojos que nos ha parecido bastante útil (ver imagen).
El sistema de climatización funciona muy bien. Lo hemos probado con temperaturas elevadas y el resultado ha sido satisfactorio. Después de tener el coche expuesto al sol durante unas cinco horas con una temperatura ambiental máxima de 35 grados, el climatizador ha sido capaz de enfriar el coche con bastante rapidez y eficacia. Lamentablemente y, por motivos obvios, no hemos podido probar la calefacción.
Todas las funciones del climatizador se pueden controlar mediante tres mandos giratorios que son precisos y que ofrecen un tacto agradable y muy conseguido (ver imagen).
Huecos y compartimentos
Todos están bien ubicados, son bastante accesibles y tienen muy buena capacidad: El conductor tiene suficientes huecos para dejar todos los pequeños objetos que se suelen llevar encima (ver imagen: 01, 02, 03, 04, 05 y 06). Delante del asiento del acompañante hay una guantera que está bien iluminada (ver imagen) y la apertura de la tapa está amortiguada. Todas las puertas tienen bolsas rígidas para guardar cosas (ver imagen). Los ocupantes de las plazas traseras disponen de bolsas en los asientos (ver imagen) y en la consola (ver imagen), además de dos posavasos integrados en el apoyabrazos central (ver imagen). También hay ganchos para colgar bolsas en el habitáculo (ver imagen: 01 y 02) y en el maletero (ver imagen). Todos los ganchos soportan un peso máximo de 3 kg (ver imagen).
Maletero
Tiene una capacidad de 486 litros. Sus formas son regulares y el piso es completamente plano (ver imagen). El fondo esta guarnecido con moqueta y los laterales con plástico rígido con un tratamiento poco refinado y más sufrido. El maletero es bastante práctico, ya que equipa ganchos para colgar bolsas o similares (ver imagen) y una red para sujetar mucho mejor la carga (ver imagen: 01 y 02).
Si abatimos los asientos de las plazas traseras, la capacidad aumenta considerablemente. Además, y lo que es mejor, los asientos quedan enrasados con el piso del maletero (ver imagen).
Los asientos se abaten fácilmente y el mecanismo dedicado a ello facilita dicha maniobra, ya que está bien fabricado para que todo se realice con poco esfuerzo y con facilidad. Se agradece, y mucho.
Debajo del piso del maletero hay una bandeja muy práctica que puede servir para dejar todos los accesorios necesarios para el mantenimiento del vehículo y los triángulos de emergencia (ver imagen). Todo un acierto.
Debajo de esta bandeja se encuentra, perfectamente protegida con una alfombra textil, la rueda de repuesto, que es de una medida inferior al del resto de las ruedas (195/90 R16) -ver imagen-.
El maletero está cubierto por una bandeja enrollable que pesa muy poco, que se extrae con facilidad y que se puede guardar debajo del piso del maletero para que no moleste y para que no tengamos que dejarla fuera del vehículo (los extremos de la bandeja quedan sujetos en estos compartimentos).
En marcha
El SsangYong Korando con tracción a las cuatro ruedas es un todocamino interesante para el conductor que valore un buen nivel de estabilidad en carretera y correctas aptitudes cuando llega el turno de circular por un camino en mal estado o en pistas algo complicadas.
Aunque el recorrido de la suspensión es generoso, transmite cierta firmeza y contiene muy bien los cabeceos y balanceos de la carrocería. Cuando realizamos un apoyo en curva, ya sea a velocidades altas o más moderadas, es un coche que transmite confianza y ofrece una buena pisada y estabilidad.
También es un coche seguro en carretera, ya que sus reacciones en situaciones límite (un rápido cambio de dirección a altas velocidades o una frenada en línea recta o en pleno apoyo) son predecibles, equilibradas y seguras.
Su nivel de estabilidad es elevado, sobre todo si tenemos en cuenta su alto centro de gravedad, peso y los amplios recorridos de la suspensión. Siempre he tenido la sensación de conducir un coche estable y fácil de dominar ante una situación extrema.
Sin ser excesivamente seca, la suspensión peca de ser algo más firme de lo que cabe esperar en un coche de estas características, sobre todo si solemos circular por caminos muy bacheados. No obstante, esa firmeza se agradece enormemente cuando necesitamos estabilidad en carretera.
Como coche de uso diario para cortos desplazamientos o para circular por la gran ciudad, el Korando es un coche perfectamente válido, ya que tiene un tacto de conducción suave y agradable, es fácil de conducir, se aparca realmente bien y es suficientemente ágil para callejear, gracias a un radio de giro reducido.
Como suele ocurrir en algunos todoterrenos, el SsangYong Korando no tiene un tren delantero demasiado directo en los giros, aunque la dirección transmite buenas sensaciones y tiene un tarado bastante suave y agradable.
Nuestra unidad de pruebas equipaba unos neumáticos Kumho Solus con medida 225/55 R18 (ver imagen). No me han parecido que destaquen por el nivel de adherencia, ni en asfalto ni en tierra. En curva el subviraje aparece muy pronto.
En campo, es un todoterreno que se defiende dignamente siempre que no le metamos en grandes compromisos. No tiene problemas para circular por caminos muy bacheados y sale bien parado en zonas con mucho barro. Si la situación se complica en exceso, siempre podemos bloquear el diferencial para salir del entuerto sin grandes problemas. Además de todo esto, es un todoterreno con una buena altura respecto al suelo y sus ángulos de ataque, ventral y salida son bastante razonables cuando las condiciones del terreno se complican (ver imagen).
Motor y caja de cambios
El SsangYong Korando está propulsado por un motor Diesel que ofrece una potencia de 175 CV y un par motor máximo de 360 Nm (ver motor). Se trata de una motorización refinada en líneas generales que no transmite demasiado ruido y vibraciones. No obstante, cuando lo arrancamos en frío o cuando ya en caliente lo estiramos, sí que se hace notar. Estabilizados en carretera, el nivel de ruidos y vibraciones es muy bajo.
Por rendimiento, es un motor bastante correcto y hasta satisfactorio. Es cierto que por debajo de 2.000 rpm ofrece una respuesta algo modesta, aunque la corta relación que tiene la primera y segunda velocidad hace que la salida desde parado sea agradable y muy acertada para el uso urbano. Entre 2.000 rpm y 4000 rpm está lo mejor que ofrece este motor. Siempre que nos movamos en ese margen de revoluciones, obtendremos una respuesta muy buena y un motor satisfactorio.
Aunque el consumo de carburante no es muy bajo, se ajusta más o menos a lo esperado en un coche de este peso, dimensiones y potencia. Según nuestras mediciones, nuestra unidad de pruebas ha dado un consumo medio combinado de 8,3 litros a los 100 km alternando carretera y ciudad en una proporción 70/30.
Nuestra unidad de pruebas equipaba un cambio manual de 6 velocidades que ofrece un buen guiado y tacto agradable. Los desarrollos del cambio están bien elegidos para buscar el equilibrio deseado entre prestaciones y consumo.
Precio y equipamiento
El modelo que pudimos probar estaba asociado al acabado Limited, tracción total 4x4 y Pack GT. Su precio final es de 27490 €, una cifra que se acerca, peligrosamente, a modelos con mucho peso en el mercado europeo como el Volkswagen Tiguan o Toyota RAV4. No obstante, con este acabado, el SsangYong Korando tiene un equipamiento muy completo en el que no falta prácticamente de nada (Sistema de navegación, tapicería de cuero, climatizador, regulador de velocidad, control de estabilidad, airbag frontales y laterales (ver imagen), asistente de aparcamiento trasero y llantas de aleación ligera). Aquí puedes configurar tu versión.
Desde mayo de 2011, el todocamino coreano, incorpora un nuevo paquete deportivo “GT” que consta de un embellecedor de color aluminio integrado en la parte inferior del paragolpes delantero y trasero y un navegador multimedia. Estos accesorios se montan en toda la gama, a excepción de la versión Line (acceso a gama). El valor de mercado de este Pack es de 1.000 €, aproximadamente; SsangYong España ha decidido no incrementar el precio de ninguna de las versiones.
Por lo tanto, el SsangYong Korando no solo tiene una promoción con un importante descuento sobre P.V.P. (de 500 a 1.600€), sino que además con esta campaña incrementa su dotación de equipamiento sin coste alguno para el cliente.
Conclusión: Este coche me produce dos sensaciones enfrentadas. Lo miro por fuera y me parece un producto muy bien terminado, un buen coche que tiene todo lo que se necesita para triunfar incluido un acertado diseño. Pero, por dentro, noto demasiado el control de costes. La calidad percibida es de un coche inferior a lo que el exterior me indicaba. No obstante, una vez en marcha, es un vehículo muy satisfactorio, con unas impresiones y prestaciones muy correctas, un buen compromiso dinámico y unas aceptables capacidades para rodar fuera de carretera. Si se corrigieran los detalles de acabado -que en Europa sí se tienen en cuenta- y fomentaran todo lo bueno que aporta este modelo, daría un gran salto de calidad y, sobre todo, de ventas. Aún así, a mí me merece la pena.
Texto: Gustavo Rodríguez
Fotos: A.R. Sastre, G. Rodríguez y SsangYong