Skoda, que se encuentra inmersa en plena renovación de todos sus productos, acaba de presentar el Fabia, su modelo urbano más representativo. En esta nueva y tercera generación, el pequeño modelo checo da un paso más para pelear con muchos argumentos en su competido segmento. Para comprobar todo lo que ha mejorado este modelo, nos subimos a la versión Diésel de 90 CV, que destaca por su bajo consumo y buen rendimiento.
En lo primero que ha cambiado el Fabia, además de ofrecer un aspecto totalmente distinto, es en sus dimensiones. De esta forma, esta tercera generación es 8 mm más corto, 90 mm más ancho y 31 mm más bajo que su predecesor. Sobre todo, se aprecia la ganancia en anchura y altura, por lo que ahora encontramos un puesto de conducción que puede ser más bajo y, además, desaparece la estrechez del anterior modelo.
Amplio y confortable
El puesto de conducción es uno de los puntos en los que más ha mejorado el urbano de Skoda. A diferencia de muchos competidores de su segmento, el Fabia ofrece permite que nos podamos adaptar a los mandos con suma facilidad sin tener que tirar en exceso de reglajes. Por su parte, los asientos son confortables y suficientemente envolventes para encontrar una postura más que correcta. Tan sólo cabe criticar la posición de los reposacabezas, que sólo resultan ideales para personas de generosa altura.
En las plazas traseras encontramos suficiente espacio, y sólo cabe criticar la posición del respaldo, que resulta demasiado vertical para encontrar el confort deseado.
El nuevo Fabia también ha ganado enteros en términos prácticos. Tanto es así, que ningún otro coche del segmento ofrece tanto espacio en el maletero. Su capacidad es de 330 litros, que alcanzan los 1.150 con los asientos posteriores abatidos. Además, encontramos ganchos, redes y un separador de carga que permite aprovechar mucho mejor todo el volumen disponible.
En el habitáculo encontramos 17 soluciones para facilitar las cualidades prácticas: un rascador de hielo bajo la tapa del depósito de la gasolina, un soporte multimedia situado en el posavasos delantero, un compartimento extra para el chaleco reflectante, una papelera en la puerta, redes de almacenamiento en los bordes interiores de los asientos delanteros, soportes para botellas de medio litro en las puertas traseras o los sistemas MirrorLink y SmartGate. Además, dispone de un espacio para botellas de un litro en la guantera.
El interior está ordenado y cuenta con gran precisión y atención por los detalles. Todos los controles están en el lugar correcto para utilizarlos de forma intuitiva. El cuadro de instrumentos tiene ahora un nuevo aspecto y todos los indicadores son fáciles de leer. Todos los controles, palancas e interruptores se han rediseñado, al igual que los tiradores de las puertas.
La elegante consola central es más estrecha que antes y está visualmente separada del salpicadero, haciendo que tenga una apariencia más clara.
El sistema de infoentretenimiento está ubicado en el centro de la consola central. Los clientes tienen tres opciones: Blues, Swing y Bolero. El más alto de la gama, Bolero, incorpora el MirrorLink, con el que se pueden ver contenidos y funciones de un smartphone en la pantalla del sistema.
Comportamiento impecable
Skoda afirma que el nuevo Fabia ha reducido su consumo y emisiones de CO2 en un 17%, lo que está realmente bien. Gracias a la incorporación de la nueva plataforma MQB (Plataforma Modular Transversal) del Grupo Volkswagen, el Fabia más ligero tan sólo pesa 980 kg -65 menos que el modelo anterior-. Con esta nueva base mecánica, es Fabia es un coche que transmite ligereza y una agilidad de reacciones que le permiten situarse dentro de los mejores modelos de su segmento. Por su parte, el tarado de las suspensiones, permiten que este coche sea confortable a la vez que estable.
Ni que decir tiene que, para mejorar al máximo la seguridad en las condiciones más desfavorables, no faltan suficientes soluciones tecnológicas para cuidar al máximo la estabilidad y la capacidad de tracción.
Ya que hablamos de componentes mecánicos, no debemos pasar por alto la nueva dirección electromecánica (C-EPS), que sustituye a la dirección electrohidráulica. La C-EPS utiliza un servomotor eléctrico de control programado en la columna de dirección para ayudar al conductor en los giros.
La unidad hidráulica utilizada previamente, con bomba servo y conductos hidráulicos, ya no se utiliza. El nuevo diseño no sólo reacciona con mayor rapidez, sino que utiliza menos espacio, por lo que se reduce el peso en 2,5 kg y también el consumo. Otra ventaja reside en que, al ser más directa y deportiva, el conductor necesita menos tiempos para mejorar la precisión de la dirección. Las vueltas del volante de un tope al otro son 2,6, por las 2,9 de la segunda generación del Fabia. Este dato corresponde al actual Fabia RS.
Todo el conjunto mecánico se redondea perfectamente con lo que encontramos bajo el capó, un motor 1.4 TDI de 90 CV que ofrece unos impresionantes valores de emisiones. Combinado con la caja de cambios manual de cinco marchas, este propulsor consume tan solo 3,4 litros a los 100 km y emite 88 gramos de CO2 por km. Comparado con el 1.6 TDI de la misma potencia con el paquete Green tec, esto significa una mejora del 11%. Al mismo tiempo, este motor destaca por su rendimiento, pues logra el par motor máximo de 230 Nm entre las 1.750 y las 2.500 rpm, acelera de 0 a 100 km/h en 11,1 segundos y tiene una velocidad máxima de 182 Km/h. También está disponible con la caja de cambios DSG.
Además de ofrecer un rendimiento notable, está mecánica no peca de ser ruidosa, y se muestra muy refinada en todo tipo de condiciones.
Disponible con un equipamiento muy completo
El nuevo Fabia llega con sistemas de seguridad de última generación que hasta ahora estaban reservados a coches de mayor categoría. El Front Assistant opcional con la Función de Freno de Emergencia en Ciudad integrada, que detiene totalmente el vehículo de forma automática, reduce el riesgo de colisiones por alcance. El Sistema de Freno Multicolisión desacelerará automáticamente el coche tras un accidente para prevenir una colisión posterior. El Driver Activity Assistant detectará la fatiga del conductor y el nuevo Speed Limiter puede evitar que el coche supere la velocidad preestablecida. El Hill Hold Control ayuda al conductor a arrancar en subida. Además, el nuevo Fabia cuenta con el control electrónico de la presión de los neumáticos de serie en los países de la Unión Europea.
El nuevo Škoda Fabia tiene la función de bloqueo del diferencial electrónico XDS+ de serie para maximizar la tracción en curva. Los elementos de seguridad pasiva incluyen hasta seis airbags que interactúan con los cinturones de seguridad de tres puntos.
El KESSY (Sistema de apertura, arranque y cierre sin llave) se estrena en el Fabia. Los sensores de estacionamiento delantero y trasero también son nuevos en el modelo. Antes, esta tecnología solo se aplicaba a la parte trasera del modelo. El Sensor de luces y lluvia asegura una visibilidad óptima con sensores integrados en cualquier situación. El sensor de lluvia controla automáticamente la frecuencia de los limpiaparabrisas mientras el sensor de luz enciende o apaga las luces de cruce en función de las condiciones.
Por último, por primera vez los clientes pueden equipar el Fabia con el gran techo panorámico de cristal.
Nuestra unidad de pruebas, que estaba asociada al acabado Style, se puede adquirir desde 13.358 €, un precio muy competitivo si lo comparamos con sus más directos rivales (consultar todos los precios).
Conclusión: Si lo comparamos con su predecesor, el nuevo Fabia ha dado un gran salto para posicionarse entre los mejores de su categoría. Ahora es un coche más amplio, práctico, confortable equipado, estable y, sobre todo más respetuoso con el medio ambiente. La versión que pudimos probar, que venía asociada al motor Diésel de 90 CV, es una muy buena opción si buscas un consumo de risa y unas prestaciones más que competentes para un uso normal.