El nuevo Renault Megane rompe moldes dentro de uno de los segmentos más competidos. La carta de presentación salta a la vista, con un diseño rompedor, moderno y elegante acompañado de un confort, agrado y calidad de primer nivel.
Este diseño tan rompedor se introduce en un segmento en el que muchos coches se parecen y en el que los fabricantes deciden no arriesgar para que probablemente las ventas no se vean afectadas, en estos tiempos tan competidos. Bajo unas líneas atrevidas nos encontramos tecnología y mucha seguridad.
En la parte delantera, la calandra de dos barras horizontales ensancha el coche para mostrar, reinterpretándola, la nueva identidad visual de los productos de la marca. Su capó esculpido y penetrante, prolongado en ambos lados por unas aletas muy marcadas, afirman personalidad decididamente deportiva. El dibujo de la parte trasera recuerda el del Avantime y se ve condicionada por un retrasado tren trasero que no pretende invadir el habitáculo.
UN COMPORTAMIENTO SEGURO
La novedosa plataforma C, que será la base para alojar las 7 carrocerías que completarán la gama Mégane y la futura gama Almera, dispone de unos nuevos trenes rodantes que asocian precisión y un elevado poder de filtración. Además del ABS, la asistencia al frenado de emergencia (S.A.F.E.) y el sistema de vigilancia de la presión de los neumáticos, innova con un control dinámico de conducción (ESP) de nueva generación que incorpora una función de control del sub-virado. Todo esto se traduce finalmente en un comportamiento dinámico de primer nivel.
El nuevo Renault Mégane se beneficia de una batalla generosa (2.625 mm) y vías anchas (1.518 mm en la parte delantera y 1.514 mm en la trasera), en beneficio de la estabilidad y de un alto potencial de adherencia. Estas medidas lo sitúan por encima de un Golf y un A3, además supera en anchura al Renault Laguna. Estas medidas le permiten disfrutar de un actuación como el de las mejores berlinas. Las generosas dimensiones de las ruedas con unas medidas de 205/55 con llanta de 16 pulgadas le otorgan un aplomo impecable y un elevado par de frenado.
Los nuevos trenes rodantes desarrollados para asociar rigor de guiado y alto poder de filtración vibratorio y acústico. El tren delantero descansa sobre una geometría seudo Mc Pherson asociada a un brazo inferior rectangular que asegura un desacoplamiento de los esfuerzos longitudinales y transversales. De este modo, obtenemos una fuerte rigidez transversal favorable a la estabilidad en carretera, a la vez que se absorben los choques longitudinales para el confort.
El tren trasero por su parte consta de un eje flexible con diagrama programado asociado a unos muelles helicoidales. El perfil deformable incorpora una barra estabilizadora para un control óptimo de balanceo. Los puntos de fijación de eje son exteriores, lo que permite situarlos de forma idónea, justo por delante y en el eje de la rueda. Este posicionamiento asegura un guiado óptimo, además se muestra como un gran aliado para afrontar cualquier tipo de curva, su caracter direccional agiliza el comportamiento.
Las barras anti-balanceo reforzadas y unas vías anchas aseguran una estabilidad en carretera del mejor nivel. El comportamiento se caracteriza por un guiado preciso y un comportamiento dinámico que se mantiene neutro y previsible, incluso en una utilización rozando el límite.
UN CONTROL DE ESTABILIDAD ELABORADO
La elaboración y el cuidado con el que se ha puesto en la elaboración de ambos trenes tiene su recompensa en el comportamiento. El control dinámico de conducción (ESP) incluye una nueva función con un control de subvirado aporta su granito de arena para obtener un comportamiento seguro, aparte nos permite movernos con rapidez y seguridad por cualquier tipo de asfalto, por muy desfavorable que sea. El ESP con control de subvirado distingue principalmente por un programa de pilotaje evolucionado. Cuando pretendemos llegar al límite se produce un subviraje, percibimos una ligera corrección que el calculador se encarga de gestionar con mayor eficacia. La corrección tiene lugar entonces por la reducción del par motor y por una acción en el sistema de frenado para disminuir la velocidad.
El control de subvirado actúa en las dos ruedas laterales, o en todas las ruedas al mismo tiempo según lo severos que seamos. Dado que puede provocar una fuerte deceleración, su entrada en acción va acompañada de un encendido automático de las luces de stop cuando experimentamos una deceleración superior a 0,8 m/s para avisar a los vehículos que nos siguen. Cabe destacar también que durante la regulación por el control de subvirado, el conductor puede acentuar el frenado si lo considera necesario.
Cuando iniciamos la marcha y se producen elevadas aceleraciones en condiciones de adherencia precarias, entra en acción una función anti-patinamiento (ASR) que completa las prestaciones del sistema ESP. El calculador lee permanentemente la diferencia de velocidad de rotación entre las 4 ruedas. Cuando se detecta el deslizamiento de una de las ruedas motrices, ésta se frena para transferir una parte del par a la otra rueda motriz. Al mismo tiempo, gracias al pedal del acelerador electrónico y a la caja de mariposas motorizada, el par motor se reduce. Cabe indicar que esta función se puede desconectar por debajo de 50 Km/h mediante un interruptor en el tablero de bordo, para facilitar los arranques en suelos blandos y deformados.
Para una conducción controlada en cualquier circunstancia, el comportamiento en carretera alcanza un alto nivel de eficacia, tanto en términos de estabilidad en carretera como de frenado.
DIRECCIÓN ARTIFICIAL
La dirección asistida eléctrica variable, cuenta con un tacto un tanto particular. Resulta algo incomodo el trazar debido a que en cuanto se produce un leve giro en las ruedas delanteras se modifica el grado de asistencia y esto nos obliga a efectuar continuas correcciones. En su favor debemos decir que el tacto es de calidad y la columna filtra a la perfección las irregularidades del firme. Por otra parte el sistema de asistencia eléctrica permite un ahorro de consumo de 0,2 l/ 100 Km de media en ciclo normalizado, respecto a una asistencia de tipo hicráulico variable. Este ahorro proviene esencialmente por el hecho de poner en reposo el sistema de asistencia eléctrica cuando no hay solicitación, al contrario de la tecnología hidráulica que requiere mantener permanentemente la presión en el circuito.
El funcionamiento de la mecánica es uno de los apartados más destacables. Este 1.9 dCi de 120cv se muestra con una suavidad envidiable y ayuda considerablemente para que el agrado general gane muchos enteros, su funcionamiento en este sentido le sitúan dentro de los mejores. La entrega de potencia se produce de una forma muy progresiva y revelándose con fuerza entre las 2.500 y las 3.700 rpm y gracias al turbo de geometría variable que reacciona desde bajos regímenes, obtenemos una respuesta inmediata a 2.000 rpm.
La caja de cambios presenta seis relaciones con un escalonamiento bien ajustado que deja la sexta velocidad como marcha ahorradora para viajar a un menor régimen, con un nivel acústico muy bajo y con unos consumos más contenidos.
Si su funcionamiento nos agradó, no podemos decir lo mismo de los consumos que quizás se quedan algo por encima de lo que esperábamos. En ciclo urbano nos costaba a bajar de los 9 litros y en carretera de los 7 litros. Si queríamos sacar partido a los 120 cv de su mecánica en zonas viradas y tramos de montaña los consumos se situaban entre 10 y 15 litros practicando una conducción mas bien deportiva.
SIMPLICIDAD DE UTILIZACIÓN
No debemos olvidarnos de un elemento tan importante como la tarjeta "manos libres" que ya se presentó en el Laguna y sin lugar a dudas ha supuesto un avance importante dentro de la Gama Renault. Gracias a la detección automática que se sitúa a 1,2 metros a la redonda nos permite abrir el vehículo sin tener que preocuparnos de accionar un botón de apertura.
Otro de los elementos que acomodan la utilización del Mégane es la tapa de carburante con apertura integrada que facilita y simplifica la maniobra del repostaje que se realiza al puro estilo de Fórmula1.
La apariencia exterior incluye su segunda entrega en el interior, este nos presenta unos acabados muy cuidados y con aspecto "Sport". El puesto de conducción, está estructurado como una cabina que se sitúa alrededor del conductor con elementos sobrios y distintivos como el freno de mano tipo "aviación" que permite disfrutar de un mayor espacio y que no condiciona la posición de un elemento tan importante como la palanca del cambio. Este freno de estacionamiento tan original tiene un fácil manejo aunque en ocasiones nos resulte algo duro.
La instrumentación destaca por estar situada entre la visera tipo moto y rodeada por unas esferas tridimensionales. Se accede visualmente con mucha facilidad y al mismo tiempo cuentan con un atractivo destacable.
En cuanto a la ergonomía, se ha definido para que el conductor forme realmente cuerpo con el coche. Adoptas con suma facilidad una postura correcta al volante ya encontramos una gran número de reglajes en el asiento, unos asientos tremendamente cómodos y confortables que sujetan con una gran corrección y por supuesto en el volante que es regulable en altura y en profundidad. La palanca de velocidades cae muy a mano pero ésta cuenta con un juego y con un tacto que no esta a la altura del conjunto, nos transmite una sensación de fragilidad muy seria y además no tiene un guiado y manejo preciso.
El salpicadero adopta las líneas que ya nos presentara el comcept car Talismán. La ergonomía llevada al extremo y los materiales, con un tratamiento visual y táctil que invita a la utilización, son opciones que contribuyen a desarrollar la facilidad y el placer al accionar los mandos, la naturalidad al manipularlos. Los mandos no solamente cumplen una función, también están pensado para el placer de utilizarlos.
Los frontales de la radio enrasados, los mandos de climatización y los guarda objetos perfectamente integrados en los volúmenes son otros tantos elementos técnicos diseñados para permitir una manipulación más intuitiva.
El maletero de 330 litros se sacrifica para que las plazas traseras se vean beneficiadas, aunque de todas formas próximamente se lanzará al mercado una versión de tres volúmenes que trndrá un maletero de una mayor capacidad.
EQUIPAMIENTO A LA CARTA
La nueva gama Mégane se compone de tres niveles de equipamiento, Pack, Confort y Luxe que se combinan con tres ambientes diferentes, Authentique, Dynamique y Privilége. Estos tres ambientes nos ofrecen tres atmosferas diferentes. En el Authentique encontramos sobriedad, en el Dynamique deportividad y en el Privilége refinamiento.
Los tapizados y las combinaciones de las tonalidades de su interior son composiciones inéditas que marcan la pauta en estos momentos. El nuevo grano del tablero de bordo resalta el aspecto y el tacto. El revestimiento permite unos acoplamientos de gran calidad y ofrece un tacto suave y encantador. En la misma línea que el Espace y Vel Satis, los textiles alteran la lógica tradicional de subida de gama ya que el terciopelo ha cedido el paso al tejido, para dar a las tapicerías un aspecto más deportivo.
La apuesta por la seguridad por parte de Renault se ha convertido en algo primordial y para ello han configurado uno de los vehículos más seguros del mercado, así lo mostraron las 5 estrellas que obtuvo recientemente en el test euroNCAP donde se realizan pruebas de choque. El equipamiento de seguridad se completa con un total de 10 airbag incluyendo los dos airbag antideslizamiento que se sitúan en las plazas delanteras que se unen a una serie de pretensores, limitadores de esfuerzo, dispositivos isofix, claculadores y captadores de choque.
La versión que probamos presentaba el equipamiento confort y el ambiente Privilege, cuenta con un equipamiento muy completo que consta de climatizador sensores de lluvia, control de presión de neumáticos, ordenador de viaje, control de crucero, llantas de aleación de 16" entre lo más destacable, todo ello a un precio de 19.820 €. Si le equiparamos con sus rivales más directos, el Megane es de los mejor situados.
El nuevo Renault Mégane presenta un gran número de novedades, ideas ingeniosas, una tecnología que le sitúan en lo más alto de su segmento, un notable nivel de calidad y terminados y además es uno de los vehículos más seguros del mercado, son argumentos suficientes como para tener como entre los elegidos, al compacto francés.