El Maserati Quattroporte GT S es la versión más deportiva de la gama. Presenta unos ajustes más dinámicos en su bastidor, un potente motor V8 de 433 CV y un diseño en su carrocería e interior específico.
Un V8 de 433 CV
El Maserati Quattroporte GT S tiene un motor de gasolina V8 de 4.7 litros de 433 CV. Está acoplado a una caja automática de seis velocidades que presenta una serie de mejoras en su software, para que ofrezca mayor rapidez en las transiciones de las marchas, tanto para subir de velocidad como en las reducciones. El cambio se puede manejar desde la palanca de cambios y desde unas leves (de generoso tamaño) situadas detrás del volante.
El bastidor del Maserati Quattroporte GT S una puesta a punto más deportiva, ofreciendo nuevos ajustes en los amortiguadores, muelles, estabilizadores, caídas y convergencias.
El sonido de los escapes traseros está cuidadosamente estudiado para que ofrezca un bramido muy deportivo.
La carrocería está adornada con una prominente parrilla, unos faros con acabado titanio en su interior, la doble salida de escape y una serie de spoilers aerodinámicos repartidos por el paragolpes delantero, trasero y en los faldones laterales.
En su interior encontramos unos asientos tapizados en cuero y Alcantara e inserciones en color titanio repartidas por todo el habitáculo.
Texto: Francisco Romero