El Dacia Lodgy es el monovolumen de 5 ó 7 plazas más barato del mercado, por lo que se plantea como una opción estupenda si andas buscando un familiar amplio, con un equipamiento más que correcto, un maletero enorme, una calidad bastante aceptable y un precio de derribo. Ahora lo puedes adquirir desde 9.850 € (ver todos los precios).
Su precio de utilitario barato no debe engañarte, ya que el Lodgy es un coche moderno que se aprovecha de toda la tecnología que utiliza el Grupo Renault en todos sus modelos, así que, tenemos un coche tan actual como cualquiera de sus rivales más directos.
Ya entrando más en detalle, el Lodgy tiene una carrocería que mide 4498 mm de largo, 1751 mm de ancho y 1683 mm alto, unas dimensiones que le permiten conseguir un habitáculo muy amplio y un maletero enorme. Esto es algo importantísimo en un coche de corte familiar, en el que se demanda fundamentalmente espacio y buenas cualidades prácticas.
Enorme por dentro
Cuando uno se sube al puesto de conducción, la primera sensación es de amplitud, gracias fundamentalmente a la amplia cota que hay en altura. Además, la posición al volante es muy elevada, tanto es así, que la primera sensación que tuve, es que estaba sentado en un gran furgón comercial. Esta mayor altura, permite que la visibilidad sea muy buena, algo que valorarán muchos conductores. Al ir tan alto, el volante y los pedales quedan en una posición algo más horizontal que en un turismo convencional.
Todos los asientos están bastante bien, aunque no sujeten demasiado. La estructura de todos ellos parece sólida y la espuma permite que el grado de dureza sea bueno para que resulten confortables. El tapizado es de una calidad bastante aceptable.
En el habitáculo, el diseño del salpicadero es moderno y funcional -no tiene que ver con aquellos salpicaderos que estrenaron el Dacia Logan y Sandero en sus respectivas primeras fases-. Todos los plásticos que hay en el interior son rígidos, pero ofrecen buen aspecto, están bien ensamblados y se limpian con facilidad. Dependiendo del nivel acabado, el salpicadero y los paneles de la puerta se benefician de un revestimiento bitono.
Con cinco o siete plazas
Nosotros probamos la versión Diesel más económica y accesible, que cuenta con un motor de 90 CV y está asociado al acabado Ambiance. Esta versión está disponible inicialmente con un habitáculo de cinco plazas, pero por sólo 500 € puedes adquirir dos asientos extra.
Las plazas traseras son bastante amplias. Gracias a la gran altura de la carrocería y a la amplia apertura de las puertas, se pueden instalar dispositivos de retención infantil sin que tengamos que ser contorsionistas o dejarnos la espalda para acoplar cualquier tipo de sillita. Además, personas con movilidad reducida también podrán acceder cómodamente sin que tenga que flexionar en exceso el tronco. Por lo demás, el Dacia Lodgy ofrece la mejor habitabilidad de su categoría en estas plazas; el radio disponible a la altura de las rodillas (144 mm) y la distancia al techo (866 mm) ofrecen las mejoras medidas del segmento y permiten que dos adultos grandes (1,90 m de estatura) se acomoden en estas plazas.
Hasta 2.617 litros de capacidad
En la versión de 5 plazas, que es la que hemos probado, el maletero es enorme. Y es que, los 827 litros de capacidad dan mucho de sí para guardar un par de sillas de bebé, unas cuantas maletas o, incluso, una bicicleta. Lo mejor de todo es que, la boca de carga es muy alta y ancha, lo que permite introducir objetos muy voluminosos. Además, si necesitas más espacio y puedes prescindir de las plazas traseras, abatiendo los asientos en proporción 60/40 puedes conseguir un volumen de 2.617 litros, una cifra a la que no es capaz de llegar, por ejemplo, un Renault Grand Scénic.
Para abatir los asientos, podemos optar por hacerlo de dos formas; una rápida en la que sólo abatimos el respaldo –es más rápida- y, otra, en la que abatimos el respaldo y la banqueta –no lleva mucho más tiempo y, de esta forma, conseguimos un piso de carga prácticamente plano-.
El maletero, como en casi todos los monovolúmenes, está tapizado con el mismo guarnecido del resto del habitáculo, por lo que no presenta piezas plásticas rígidas que resulten resbaladizas y generen ruidos provocados por los baches o las vibraciones.
En el caso del Lodgy, la iluminación del maletero es algo pobre –tan sólo hay un pequeño punto de luz en la parte izquierda- y no tiene un equipamiento demasiado completo, al menos en nuestra unidad de pruebas. No obstante, en la parte izquierda hay un compartimento formado por una red, en el que está guardado el kit antipinchazos, el gancho para remolcar el vehículo y la llave que nos permite manipular los tornillos de la rueda. Ya en la parte derecha, nos encontramos el gato, que está sujeto con solidez.
Espacios guardaobjetos
Aunque se trate de un coche familiar, el Dacia Lodgy no cuenta con demasiados compartimentos para guardar los pequeños objetos que solemos llevar encima y, además, casi todos no cuentan con demasiada capacidad. No obstante, el volumen total de todos los espacios guardaobjetos va desde los 20,5 hasta los 30 litros. En las plazas delanteras encontramos las habituales bolsas rígidas integradas en las puertas, dos posavasos y un pequeño hueco extra que da bastante de sí, un compartimento bastante profundo en el centro del salpicadero (dependiendo del nivel de acabado este hueco puede tener tapa), un posavasos disponible para las plazas traseras y una pequeña guantera y una bandeja ubicada delante del asiento del acompañante.
En el caso de las versiones con habitáculo de siete plazas, hay un apoyabrazos que integra dos huecos para dejar botes de refrescos y objetos de similar tamaño.
Además de todos estos compartimentos, se pueden adquirir algunos accesorios, como por ejemplo, una pequeña percha que puede acoplarse a los reposacabezas, barras de techo transversales sobre otras longitudinales, alfombrillas de caucho, cadenas para la nieve, cofre de techo, enganche de cuello de cisne, portabicicletas sobre enganche y faldillas delanteras y traseras.
Buena disposición y funcionamiento de todos los mandos
El buen ‘saber hacer’ de Renault se nota rápidamente en la disposición y diseño de todos los mandos del interior. Todos son fáciles de manejar y su ubicación es más que correcta para que se puedan manejar perfectamente.
La instrumentación, que está formada por tres esferas, también cuenta con una tipografía clara y moderna. Además, la esfera de la derecha, integra un pequeño display en el que se muestra el nivel del carburante, todos los datos del ordenador de a bordo y varios testigos que nos alertan de algunas funciones del vehículo.
Aunque nuestra unidad no lo equipaba, el Lodgy, al igual que los nuevos Logan y Sandero, puede incluir el sistema multimedia integrado MEDIA NAV, que ya lo pudimos probar en el Sandero Stepway y que funciona realmente bien (más información). Solo cuesta 360 €.
La unidad probada equipaba la radio normal que este coche lleva de serie. También funciona muy bien, todos los mandos que la componen están muy bien ordenados para facilitar su manejo y la calidad del sonido es bastante aceptable. Además, integra dos tomas USB y jack frontales.
Excelente rendimiento mecánico
Probamos la versión Diésel menos potente y más económica. En líneas generales me ha parecido muy satisfactoria por el buen compromiso que guarda entre prestaciones y consumo de carburante.
Como en otros modelos del Grupo Renault, al Dacia Lodgy le sienta muy bien el 1.5 dCi, ya que se muestra como un motor más que solvente, que es capaz de mover con soltura la carrocería y masa que porta este familiar de tamaño medio. En este sentido, el pequeño motor Diésel de Renault sigue destacando por su buen rendimiento y por la capacidad que tiene de sacar partido a los 90 CV que tiene esta versión de acceso.
Todas las pruebas que hemos realizado, han sido sin ocupantes y sin equipaje, aún así, siempre he tenido la sensación de que es un motor que puede mover con soltura al Lodgy en cualquier tipo de condiciones y practicando una conducción normal.
El consumo de carburante es muy bajo. En autovía y autopista circulando a una velocidad que nunca excedía los 120 km/h, el consumo siempre se estabilizaba en torno a los 6,0 litros, lo que es un buen dato. Ya en ciudad, el gasto no aumenta es exceso y es muy complicado superar los 7,5 l/100 km.
El ruido generado por la aerodinámica, rodadura y motor no es bajo, aunque tampoco resulta molesto ni cansa en exceso cuando se realizan muchos kilómetros. Por suspensiones, es un coche confortable que aísla correctamente a los ocupantes de las imperfecciones del asfalto.
Muy estable y seguro en carretera
Lo que sí que me ha sorprendido gratamente, es su comportamiento en carretera. Y es que, conduciendo el Lodgy, siempre he tenido una gran sensación de seguridad, incluso a altas velocidades y en situaciones críticas en las que toca variar la trayectoria del coche con rapidez para, por ejemplo, librar un obstáculo. En estas situaciones los balanceos de la carrocería están bastante contenidos y las reacciones al límite son muy sanas y predecibles.
En cuanto a la conducción se refiere, no me gustaría pasar algún detalle que otro por alto. Por ejemplo, el volante, que está forrando con un plástico blando de bastante calidad, resbala más de lo deseado, lo que resulta algo incómodo. Además, la dirección es algo más dura de lo deseado y el embrague tenía un tacto algo denso.
Equipamiento y costes de mantenimiento
Pese a que el Dacia Lodgy es un coche muy barato, es capaz incluir dentro de su equipamiento elementos interesantes como, por ejemplo, el limitador de velocidad, radar de proximidad trasero, control de tracción y estabilidad, dos airbag frontales, dos laterales cabeza/tórax en las plazas delanteras y de cinturones de seguridad con limitadores de esfuerzo y pretensores pirotécnicos en la plaza del conductor entre lo más destacable.
Como todos los productos de la familia Dacia, el Lodgy garantiza unos costes de mantenimiento y de uso especialmente competitivos gracias a unos intervalos de cambio de aceite y periodicidades de cambio de las pastillas de freno y de los neumáticos espaciados. La sustitución del filtro de aire se realiza cada 80.000 km (o cada cuatro 4 años) y la del filtro de gasóleo cada 60.000 km. Además de todo esto, el Lodgy se beneficia de una garantía de 3 años o 100.000 km, lo que antes se cumpla.
Conclusión: El Lodgy es el monovolumen de tamaño medio más barato que el dinero pueda comprar. Pero barato no es sinónimo de malo, ya que el familiar de Dacia es capaz de ofrecer un nivel tecnológico de última generación, unos niveles de calidad satisfactorios, una gama de motores muy interesante, mucho espacio en su interior y un maletero enorme en el que puedes meter de todo. Así que, si estás buscando un buen familiar a precio de derribo, el Lodgy debería ser tu elección.