El BMW Serie 6 Cabrio es uno de los mejores descapotables que hay actualmente en el mercado. Entre sus virtudes, que son muchas, destaca por su enorme calidad de fabricación, confort de marcha, comportamiento dinámico en carretera y abundante equipamiento. Su motor de 313 CV de la versión Diésel que hemos probado es una motorización sobresaliente por potencia, funcionamiento y consumo de carburante.
Para empezar y antes de entrar en faena, me gustaría comentarte que no tuve la oportunidad de subirme a la anterior generación de este descapotable de BMW, por lo que no puedo contarte todo lo que ha mejorado este modelo respecto a la anterior generación. No obstante, imagino que, por una lógica aplastante, el nuevo tiene que ser mucho mejor en calidad, tecnología y equipamiento. Lo que sí puedo asegurarte es que, desde el primer segundo que he vivido con este coche, las palabras que han primado en todo momento, son las de calidad y placer.
Una planta imponente
El primer impacto visual es más que bueno, y eso que nuestra unidad, tal y como puedes apreciar en las fotos, era de color blanco. Lo ves, y sientes que estás ante un coche poderoso de corte deportivo y con una silueta muy atractiva. Con sus 4.894 milímetros de largo, el nuevo BMW Serie 6 Cabrio supera al modelo anterior en 74 milímetros. También la distancia entre ejes aumentó por la misma cantidad, y es ahora de 2.855 milímetros. El ancho del coche es ahora 39 milímetros mayor, siendo de 1.894 milímetros, mientras que la altura se redujo en 9 milímetros, por lo que ahora es de 1.365 milímetros.
Llega la hora de abrir la puerta y, ésta, nos da la bienvenida con la suavidad y solidez de un buen BMW. A continuación, decido sentarme y, en ese instante, me encuentro con dos inconvenientes. En primer lugar, los asientos delanteros. Éstos, estaban forrados en un cuero de color negro suave agradable y de mucha calidad. Sin embargo, a mi me resultaron poco envolventes y no demasiado ergonómicos como para sentirte plenamente integrado en ellos.
El segundo inconveniente, son algunos plásticos, básicamente los lacados en negro presentes en la parte más visible del salpicadero y el que cubre parte de la pantalla del sistema de climatización que, sin ser malos, en mi opinión debería ser de mejor calidad. Por lo demás, el resto de materiales es muy bueno, y el cuero no sólo está presente en los asientos, también en el salpicadero y en los paneles de las puertas.
Vistos estos pequeños inconvenientes, decido echar un vistazo al resto del interior antes de ponerme en marcha.
Mucha calidad y una postura al volante muy cuidada
Para empezar, como buen BMW que se precie, la postura al volante es perfecta. Así que, tanto si te gusta ir en una posición baja, como alta, irás muy cómodo y encontrarás todos los mandos de control en la posición ideal para conducir con total comodidad. El tablero, orientado hacia el conductor, es uno de los elementos de diseño típicos de la marca. La parte central del salpicadero, que acoge la pantalla Control Display del sistema de mando iDrive, las salidas centrales de aire y los elementos de mando del sistema audio y del climatizador, están orientados ligeramente hacia el conductor. Además, la palanca de cambios, las teclas para la activación del freno para aparcar, la capota y el sistema de control del dinamismo de la conducción, se encuentran en una superficie rebajada en el lado del conductor y que se abre hacia el lado del acompañante.
Como cabe suponer, todos los mandos tienen un funcionamiento impecable, ofrecen un tacto formidable, y el orden y la lógica se impone de forma aplastante. De todo lo que nos encontramos en el interior del BMW, destacaría el nuevo tablero de instrumentos de tecnología black-panel, en el que se combinan los instrumentos redondos propios de un coche deportivo, con la moderna tecnología de los display. Aunque se trata de un cuadro de instrumentos virtual, da mucho juego para ofrecer un montón de información, tienen muy buena resolución y se ve con claridad, incluso si vamos descapotados en días muy soleados.
Conectividad de última generación
Los sistemas de navegación, telefonía y entretenimiento se controlan de serie con la unidad de mando iDrive, que incluye la pantalla Control Display de innovador diseño, que se estrena en el nuevo BMW Serie 6 Cabrio. El monitor de a bordo es, por primera vez, una pantalla independiente, que de serie tiene 7 pulgadas. Si se combina con el navegador opcional Professional, esta pantalla tiene 10,2 pulgadas, enmarcada con un listón galvanizado y cromado de alta calidad. La pantalla tiene un grosor mínimo, por lo que puede ser calificada de pantalla plana. La nueva disposición del Control Display, más desplazada hacia el interior del habitáculo, también determina la configuración del tablero de instrumentos. Su posición marcadamente vertical y su posición saliente delante del conductor y su acompañante, corresponde a la estética habitual de lanchas muy rápidas.
Una vez toqueteado todo, y teniendo claro que los ingenieros de BMW han hecho un buen trabajo para que el conductor tenga a su alcance mucha información y gadgets para disfrutar de una conducción de primer nivel, decido acceder a las plazas traseras para ver qué tal están. Antes de nada, yo soy de los que, cuando tiene un cabrio entre manos, no intenta dar más protagonismo del que merecen a los asientos traseros y al maletero. Una vez dicho esto, accedo a las plazas traseras, y para ello tengo que tirar de una pestaña mecánica que facilita que el respaldo del asiento se abata hacia delante. Posteriormente, hay que pulsar un botón para que un sistema eléctrico deslice la banqueta hacia la misma posición. Esta solución está pensada para ganar en confort de uso, aunque creo que todo el proceso resulta algo lento y pesado.
Con el asiento delantero colocado en su posición original, y con el coche capotado, no se nota una gran sensación de espacio en las plazas traseras y, pese a que hay ciertas limitaciones en anchura y no tenemos apoyabrazos en el centro de los dos asientos, me siento cómodo y sin grandes problemas.
Un maletero bastante capaz
Una vez vistas las plazas traseras, abandono el habitáculo del Serie 6 para dirigirme al maletero. Pulso la insignia de BMW para abrirlo, y me encuentro con bastante espacio, concretamente 300 litros cuando la capota está abierta, por lo que es posible introducir en él, por ejemplo, dos bolsas de golf de 46 pulgadas, además de una maleta de negocios (ver imagen). Si la capota está cerrada, el vano que de posiciones variable que la acoge, puede desplazarse de modo muy sencillo y con una sola mano hacia arriba, con lo que la capacidad del maletero aumenta a 350 litros. Para mí es más que suficiente.
Después de pasar revista a todo, estoy impaciente por conducir y disfrutar de los placeres de este coche. Me dispongo a tirar de reglajes para ajustar el asiento y el volante, y al momento me encuentro como si el coche me lo hubieran hecho a medida –si los asientos fueran mejores, la sensación sería perfecta-. Una vez acoplado a los mandos, la sensación es placentera… sobre todo por el confort que te ofrece este coche en estático, por la calidad de casi todos los materiales y, por supuesto, por el volante. Este mando esencial para la conducción –algo maltratado por muchos fabricantes- resulta perfecto en el BMW; su tamaño es ideal, resulta sólido, de generoso grosor y está fabricado con unos materiales de mucha calidad. Aunque a mí me gustan los volantes más bien de aro finito, éste me encanta tal y como es, por lo que ni se me ocurre ponerle una sola pega.
Ya estoy dispuesto para iniciar la marcha y, para recorrer mis primeros metros con el Serie 6, pulso el botón para arrancar el motor. En ese momento, se pone en funcionamiento una joya de la ingeniería. Se trata de un Diésel de 6 cilindros en línea y 3.0 litros de cilindrada que entrega una potencia de 313 CV y un par motor máximo de 630 Nm disponible entre 1.500 y 2.500 rpm (ver motor). Pero dejando las cifras de lado, que no dejan de ser impresionantes, lo mejor son las sensaciones. Y es que nos encontramos con un motor Diesel con sabor a gasolina, que es suave, refinado, potente, satisfactorio y, por qué no decirlo, suena de maravilla.
Prestaciones de deportivo y consumos de utilitario
Pero además de tener unas prestaciones de un auténtico deportivo (podemos alcanzar los 250 km/h y llegar a los 100 km/h en tan sólo 5,5 segundos), este Gran Turismo de velocidades y aceleraciones respetables, es capaz de gastar muy poco carburante. Según nuestras mediciones, a velocidades normales y en ciclo mixto este BMW no ha consumido mucho más de 6,6 litros a los 100 kilómetros, lo que son cifras de un utilitario de menor masa, motor y, por supuesto, potencia.
Este bajo consumo, se consigue gracias a una serie de medidas que BMW denomina comercialmente como “EfficientDynamics”. Entre lo más destacable, cabe citar el sistema de recuperación de la energía de frenado, la dirección asistida electromecánica (EPS) y la utilización de materiales ligeros y los neumáticos de menor resistencia de rodadura. El nuevo BMW 640i Cabrio tiene, además, un control automático de las mariposas y la función Auto Start Stop. Al detener el coche en un cruce o en un estancamiento de tráfico, el motor se apaga automáticamente. Cuando el conductor retira el pie del pedal del freno, el motor vuelve a ponerse en marcha inmediatamente. Utilizando la función Auto Hold, el motor se pone en marcha al pisar el pedal del acelerador.
Una caja de cambios sobresaliente
Para rizar el rizo, este motor se encuentra acoplado a una caja de cambios automática de ocho velocidades, que es una delicia por rapidez, suavidad, funcionamiento y gestión de marchas cuando funciona en una modalidad 100% automática. Si queremos cambiar de una forma manual, lo podemos hacer mediante la palanca de cambios, o bien, desde unas levas situadas detrás del volante. Todo funciona de maravilla.
Después disfrutar de los placeres que te ofrece el motor, salgo de la aburrida autovía y me dispongo a adentrarme por otro tipo de trazados más divertidos. En cuanto me topo con un par de curvas de velocidad media y alta, me encuentro con un coche que, pese a ser cómodo, resulta muy eficaz y fácil de conducir cuando vamos más pasados de lo debido o, simplemente, cuando comienzan las pérdidas de adherencia. De todas formas, el Serie 6 equipa un sistema de control del dinamismo de la conducción que le permite jugar en otra liga para ser una referencia en cuanto a comportamiento dinámico se refiere. Pulsando una tecla que se encuentra en la consola central, el conductor puede elegir el reglaje de su coche activando las modalidades «NORMAL», «SPORT» y «SPORT +».
En combinación con el sistema opcional Adaptive Drive, se dispone adicionalmente de la modalidad «COMFORT». En este caso, el sistema de control del dinamismo de la conducción incide en la progresión del pedal del acelerador, la capacidad de respuesta del motor, la línea característica de la servodirección, los umbrales de reacción del sistema de control de la estabilidad DSC, el dinamismo del cambio de marchas de la caja automática y, además, también en la línea característica de la amortiguación y del sistema de supresión de las inclinaciones laterales. En los modelos equipados con la dirección integral activa, se controla el grado de asistencia de la dirección y, adicionalmente, el reglaje básico de la dirección según la modalidad de control dinámico que activó el conductor. De esta manera, en las modalidades «SPORT» y «SPORT+» aumenta el comportamiento deportivo del coche.
Por su parte, el sistema de frenos de materiales ligeros, de discos autoventilados con pinzas flotantes, permite una dosificación confortable y precisa a la vez. Su funcionamiento cuenta con el apoyo del sistema de control dinámico de la estabilidad (DSC). Este sistema de estabilización incluye, entre otros, el sistema de antibloqueo de los frenos (ABS), el control dinámico de la tracción (DTC), la asistencia de frenado en curvas (Cornering Brake Control, CBC), el control dinámico de los frenos (DBC), el asistente para arrancar cuesta arriba, la función de frenado ligero para secar los discos y el sistema de compensación de la fatiga de los frenos.
Techo de lona eléctrico de gran calidad
Dejo casi para el final la capota, que es extraordinaria por calidad, funcionamiento y por lo bien que aísla los ruidos aerodinámicos. Está tan bien hecha, que nunca tienes la sensación de que estás conduciendo un descapotable.
La función de abrir y cerrar la capota se activa de serie mediante una tecla que se encuentra en la consola central. Con el sistema opcional de acceso de confort, las funciones de la capota pueden activarse también con una tecla de la unidad de mando a distancia de la llave del coche. La operación de abrir la capota dura 19 segundos, mientras que al cerrarla transcurren 24 segundos. Las dos funciones también pueden activarse con el coche en movimiento hasta una velocidad de 40 km/h .
La capota con las columnas C prolongadas del nuevo BMW Serie 6 Cabrio se ofrece en tres colores, entre ellos el nuevo color antracita con matices plateados, que tiene un sedoso brillo que irradia gran calidad. Para el exterior se puede elegir entre dos pinturas normales y siete metalizadas. En vez de elegir el equipamiento de piel Dakota de serie, puede optarse por la variante exclusiva de piel napa, que se ofrece en cuatro colores. Si lo desea el cliente, si opta por el equipamiento de piel de exclusiva napa, además del tablero de instrumentos también pueden estar recubiertos de napa la consola central y la parte superior de los revestimientos de las puertas, así como los recubrimientos laterales en la parte posterior del coche. Otra opción adicional consiste en un pespunte de contraste en la piel napa exclusiva que cubre los diversos elementos del habitáculo. Las costuras dobles, cuyo color contrasta con la superficie de piel, se obtiene una estética que irradia gran calidad y que, además, acentúa las formas de las superficies.
Precio y equipamiento
El equipamiento de confort de serie del nuevo BMW Serie 6 Cabio incluye, entre otros, climatizador de dos zonas de regulación que, además, tiene una modalidad de funcionamiento cuando se conduce con la capota abierta, equipo audio de alta fidelidad con unidad CD y conexión AUX-in, volante de funciones múltiples y un sensor de lluvia con control automático de la activación de los faros. Entre las guindas que incluye la gama de equipos opcionales, cabría mencionar las luces de orientación automática en curvas, el volante calefactado, el sistema de ventilación activa de los asientos, los asientos de funcionamiento activo, y el sistema de navegación Professional, con disco duro para guardar mapas y planos, además de una colección personalizada de títulos musicales.
Para el nuevo descapotable también se ampliaron las funciones de los sistemas de asistencia y los servicios de movilidad de BMW ConnectedDrive. El nuevo BMW Serie 6 Cabrio puede estar equipado, además, con la función de advertencia de cambio de carril y de abandono involuntario de carril, el sistema de información sobre límites de velocidad, la función de visión nocturna BMW Night Vision con capacidad de detección de personas, una cámara para conducir marcha atrás, función de vista panorámica Surround View, y el asistente para aparcar BMW Parkassistent. Las innovadoras tecnologías optimizan la integración del iPhone de Apple y de otros teléfonos inteligentes, así como la inclusión de unidades de música. Además, en el nuevo BMW Serie 6 Cabrio se estrena la nueva generación de la pantalla virtual Head-Up-Display, que constituye una opción única en este segmento automovilístico. Este sistema proyecta informaciones de relevancia para la conducción sobre el parabrisas, justo en el ángulo de visión del conductor. La representación de las gráficas de procesamiento tridimensional, ahora también incluye todo el espectro cromático, de modo que los símbolos de tráfico aparecen de manera completamente realista.
El BMW 640d Cabrio está disponible con tracción trasera o integral. Nosotros hemos probado el primero de ellos, que lo puedes adquirir desde 109.450 € (ver todos los precios).
Conclusión: Sin tener una referencia clara de sus competidores, la versión descapotable de la nueva Serie 6 es un auténtico automóvil de ensueño que enamora por su diseño, calidad, tecnología, equipamiento y comportamiento dinámico. Si a eso le sumas que puede tener un motor Diésel sobresaliente que ofrece unas excelentes prestaciones y un consumo ridículo, obtenemos un producto de referencia dentro de su selecta categoría.