La segunda generación del Serie 1 supone, al igual que la nueva Serie 3, un cambio dentro de BMW que afecta, básicamente, a la conducción y confort de las suspensiones. Ahora, el nuevo Serie 1 es un coche más razonable para el día a día, más confortable, más grande por fuera, más amplio por dentro y más equipado. La versión más económica (116i de 136 CV) está disponible desde 24.550 €.
Nosotros nos hemos subido a una de las versiones Diesel más potentes de la gama, no es otra que el 120d de 184 CV (ver gama). Es una opción recomendable para quién busque un compacto dotado de un buen motor Diesel de tacto refinado, bajo consumo y buenas prestaciones. Nuestra unidad de pruebas tenía una carrocería de cinco puertas y estaba asociada a la línea de acabado “Sport Line”. Este modelo está a la venta desde 30.300 €.
Carrocería e interior
A primera vista, la carrocería sigue la línea de la primera generación. Lógicamente, hay bastantes cambios en su diseño, pero, en esencia, las líneas son las mismas. Sin embargo, nosotros nos tomamos la molestia de compararlo con un Serie 1 de primera generación y, cuando los pones juntos, la primera sensación que tiene uno es que, el nuevo, es mucho más cocheÂ…. y no sólo por tamaño, también por empaque.
Ya dentro, se nota que hay más espacio. No es que sea mucho más amplio que el anterior modelo, pero la ganancia que ha habido en dimensiones se nota. Es como si BMW quisiera que fuera un poco más amplio, pero sin perder la esencia de la anterior generación.
En comparación con el modelo anterior, la carrocería del nuevo BMW Serie 1 mide 4.324 milímetros (85 milímetros más larga), la distancia entre ejes ahora es de 2.690 milímetros (30 milímetros mayor) y las vías miden 1.765 milímetros (17 milímetros más anchas). La única cota que se mantiene invariable es la altura (1.421 milímetros).
Las mayores dimensiones del coche redundan en un mayor espacio a la altura de las rodillas de los pasajeros que ocupan los asientos traseros (21 milímetros más) y, también, en un mayor volumen del maletero de 360 litros (30 litros más).
Mandos: disposición y funcionamiento
Al volante, como buen coche alemán que se precie, la postura está estudiada con lógica para que cualquier tipo de conductor se encuentre cómodo e integrado con todos los mandos.
Para empezar, el volante tiene un tamaño perfecto. Ni tiene formas extrañas, ni es demasiado grande. Además, está fabricado con buenos materiales, el aro está forrado con un tapizado de cuero de calidad, no está recargado de botones y transmite mucha solidez cuando lo tocas y lo utilizas. Una auténtica maravilla.
Detrás del volante está el panel de instrumentos. Al igual que el volante, también merece una mención especial, no sólo por su calidad, sino por lo ordenado que resulta. En este sentido, no nos volvemos locos para consultar cualquier dato del ordenador de a bordo o para visualizar la velocidad a la que circulamos, por ejemplo. Al mismo nivel se encuentra la tipografía de los números y las letras, que es impecable y ejemplar. Tampoco me olvido de la iluminación, que es la típica tonalidad ámbar de BMW y que está perfectamente diseñada para que no nos moleste lo más mínimo cuando conducimos de noche durante mucho tiempo.
Por lo demás, todos los mandos siguen la misma línea, es decir, orden, sencillez y lógica por encima de otras cosas, entre ellas, el diseño. Cualquier función que queramos manejar (luces, equipo de sonido, climatizador o navegador) es una tarea sencilla que no implica volvernos locos. Además, todos ofrecen un tacto de calidad y transmiten bastante solidez.
Las versiones equipadas con el navegador opcional o con la Radio BMW Professional, icluyen el sistema de mando BMW iDrive. Este sistema integra el botón de mando Controller y los botones de acceso directo que se encuentran en la consola central y, además, una nueva pantalla plana. Dependiendo del equipamiento del coche, la pantalla Control Display puede ser de 6,5 o de 8,8 pulgadas. Está plenamente integrada en el salpicadero y gracias a su alta resolución es ideal para la utilización de todos los sistemas de información, entretenimiento, telecomunicación y navegación.
Debajo se encuentran las salidas de aire y los elementos de mando del climatizador y del sistema audio, que ocupan una superficie especialmente ancha. De esta manera, se acentúa adicionalmente la orientación horizontal del habitáculo (ver imagen).
El iDrive se maneja bastante bien. Es un mando que BMW ha sabido evolucionar para que sea tremendamente útil y para que, sobre todo, nos permita manejar un motón de funciones sin desesperarnos.
El navegador Business memoriza los planos y mapas en una memoria flash, mientras que el navegador Professional tiene un disco duro. El disco duro del navegador Professional tiene una partición de hasta 12 gigabytes que está reservada para la colección de títulos musicales seleccionados por el usuario según sus preferencias personales.
Con el cambiador de DVD, la unidad de recepción de Digital Audio Broadcasting (DAB), doce altavoces y el amplificador digital de 360 vatios del sistema Harman Kardon de alta fidelidad, es posible disfrutar al máximo de los sistemas de entretenimiento del coche.
La gama de Accesorios Originales de BMW disponibles para el BMW Serie 1 también incluye, entre otros, el sistema DVD para los pasajeros de la parte trasera, un puerto USB y el sistema de navegación «Portable».
Asientos y habitabilidad interior
Como he comentado anteriormente, la postura al volante es muy buena. Se encuentra a un muy buen nivel, gracias al diseño del puesto de conducción y a los amplios reglajes del volante y los asientos. Estos últimos son muy confortables y, pese a no ser demasiado envolventes, uno se encuentra cómodo y bien acoplado al respaldo y la banqueta. Los reposacabezas quedan cerca de la cabeza y, la banqueta, se puede regular en longitud mediante un mando mecánicoÂ… todo un acierto (ver imagen).
Gracias a la infinidad de reglajes y al diseño del interior, al volante se pueden situar personas de diferentes alturas y complexiones con facilidad. Respecto a muchos coches de este tipo y tamaño, en el BMW Serie 1 podemos ir muy cerca del suelo para poder llevar las piernas bastante estiradas.
Detrás se va cómodo y hay suficiente espacio como para que dos adultos viajen con un buen nivel de confort. Sin embargo, el ángulo de apertura de las puertas traseras no es demasiado amplio y la boca de acceso al habitáculo es más bien pequeña.
En cuanto los acabados del interior poco que decir. La calidad de la mayoría de los plásticos del interior es buena sin ser lujosa, pero lo mejor de todo es la sensación de solidez que tienen todos los guarnecidos y el salpicadero. Sin duda, es bastante superior a la que se puede encontrar en cualquiera de los coches de su tamaño.
Compartimentos y maletero
Al igual que el anterior Serie 1, el nuevo no cuenta con un gran número de compartimentos, aun así es un coche práctico y mejora con creces a su predecesor. Hay huecos portaobjetos de gran tamaño en las puertas (ver imagen), cuenta con una guantera de gran volumen (ver imagen), tiene dos portabebidas en la consola central (ver imagen) y, además, un compartimiento debajo del apoyabrazos, por lo que ofrece una cantidad mayor de espacios para guardar objetos diversos (ver imagen).
El maletero tiene un volumen de 360 litros (30 litros más que su predecesor). De serie, los asientos se abaten en la proporción habitual de 60:40, sin embargo, opcionalmente se puede adquirir un sistema que permite abatir los respaldos en proporción de 40:20:40, como era el caso de nuestra unidad de pruebas. Con esta última opción, es posible transportar objetos largos abatiendo únicamente la parte central.
En cualquiera de los dos casos, con los respaldos abatidos, la capacidad de carga puede aumentar hasta los 1.200 kg. Además, los asientos quedan prácticamente enrasados con el suelo (ver imagen).
Motor y caja de cambios
Bajo el capó se encuentra un motor Diesel de última generación (ver imagen). Se trata de un cuatro cilindros dotado de un turbocompresor de geometría variable e inyección directa por conducto común con inyección mediante electroválvulas. Todo esto se traduce en un buen motor que ofrece una respuesta agradable, progresiva y, a la vez, contundente, ya que permite que podamos ganar velocidad con rapidez.
También es un motor refinado que transmite pocos ruidos y vibraciones, tal y como cabe esperar en un coche de este precio. El ruido mecánico tan sólo se hace evidente cuando hacemos girar el motor a un régimen de giro alto. En ese tipo de condiciones, sin que el ruido sea excesivo, sí que se hace notar y no puede ocultar que se trata de una motorización de gasoleo.
Si hablamos de cifras, el panorama sigue siendo muy bueno. Es una mecánica que entrega una potencia de 184 CV a 4.000 rpm y ofrece un par máximo de 380 Nm entre 1.750 y 2.750 rpm. Con todo esto, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7,2 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 228 km/h.
Pero si sus prestaciones comienzan a ser respetables, el consumo es muy bajo. Ridículo diría yo si se tiene en cuenta que el motor es potente y el peso del coche es elevado (1.440 kg). Según nuestras mediciones, hemos registrado un consumo medio de 5,6 litros en ciclo combinado, una cifra que no son capaces de alcanzar muchos utilitarios con motores diesel menos potentes.
Estas cifras de consumo tan ridículas, se consiguen gracias a la trabajada eficiencia del motor, posiblemente a la aerodinámica y, también, a una serie de medidas específicas que permiten rebajar, aún más, el consumo de carburante. BMW las denomina EfficientDynamics.
Entre todas estas medidas concebidas para que este BMW Serie 1 gaste muy poco, destacan la función Auto Start/Stop -que desconecta el motor automáticamente cuando el coche se detiene en cruces o retenciones de tráfico, se ofrece tanto en combinación con la caja de cambios manual como junto con la caja automática-, el sistema de recuperación de energía de frenado, el indicador del punto óptimo para cambiar de marcha, un diferencial del eje posterior de grado de eficiencia optimizado, la bomba de aceite regulada según mapa característico, la bomba de gasolina regulada en función de la presión y de las revoluciones, un sistema de climatización con compresor desacoplable y, también, neumáticos de menor resistencia de rodadura –nuestra unidad equipaba unos Bridgestone Potenza S001 con medida 225/45 R17 con código de carga "91" y de velocidad "W"- (ver imagen).
Además de todo esto, el conductor puede activar el Modo ECO PRO, una opción especialmente económica, ya que el sistema adapta el control del motor, regula de manera más eficiente el funcionamiento de la calefacción y del climatizador, adapta la calefacción de los espejos retrovisores exteriores y regula correspondientemente la calefacción de los asientos. Diversos indicadores informan al conductor sobre la autonomía adicional conseguida con este modo de reglaje. Además y dependiendo del equipamiento del coche, en el Control Display y en el cuadro de instrumentos aparecen útiles sugerencias para optimizar el estilo de conducción a favor de una mayor economía. La indicación ECO PRO que aparece en la parte inferior del cuentarrevoluciones ayuda al conductor a dosificar la fuerza que aplica sobre el pedal del acelerador para que el propulsor funcione dentro de su margen más eficiente (ver imagen).
Nuestra unidad de pruebas equipaba la nueva caja automática de 8 velocidades que es una auténtica maravilla; es rápida, gestiona muy bien las marchas en función del tipo de conducción que queramos practicar y tiene un funcionamiento refinado en líneas generales. Esta caja se puede utilizar de forma totalmente automática o manual desde la palanca de cambios, o bien, desde unas levas situadas detrás del volante.
En marcha
Sobre el papel, el BMW Serie 1 cuenta con un bastidor bastante elaborado, con eje delantero de doble articulación, tirantes, patas telescópicas y barras estabilizadoras, y eje trasero con suspensión de cinco brazos. Además, muchos componentes de la suspensión delantera están fabricados en aluminio, el reparto de pesos es perfecto (en proporción 50:50) y la tracción es trasera.
Por si fuera poco, el nuevo BMW Serie 1 puede equipar un sistema que permite variar el modo de conducción en cuatro niveles prefijados: Comfort (que es el que se activa por defecto cuando arrancamos el coche), Sport, Sport+ y ECO-PRO (se pueden controlar desde este mando). Con las dos modalidades más deportivas (Sport y Sport +) se consigue mejorar la respuesta del motor al acelerar, endurecer la dirección, meterle más firmeza a las suspensiones y limitar las intervenciones del control de estabilidad -con el modo Sport + podemos desconectarlo por completo-.
Con la modalidad más radical activada (Sport +) no me ha parecido que sea un coche incómodo, al menos si lo comparamos con modelos equiparables de BMW de anteriores generaciones. He tenido la sensación de conducir un coche bastante noble de reacciones y fácil de controlar en situaciones en las que la adherencia comienza a flaquear. A mí, personalmente, me hubiera gustado que, con esta modalidad, los balanceos y cabeceos de la carrocería fueran menores.
Sin que me parezca un coche muy eficaz y concienzudamente diseñado para que sea rápido en curvas, sí que resulta estable y divertido de conducir. Lo mejor de todo es que trata un coche racional y concebido para la vida real, en la que las altas velocidades no existen y el confort es más lógico. En este sentido, resulta tremendamente satisfactorio cuando hay que circular por entornos urbanos o tenemos que estacionar en espacios reducidos.
En marcha, todos los ruidos generados por el motor y el bastidor están correctamente aislados sin que molesten demasiado. Sin embargo, el ruido aerodinámico se hace notar más de lo deseado, al menos no debería ser tan evidente en un coche de este precio y categoría.
Precio y equipamiento
Una de las grandes novedades que tiene el Serie 1, es la incorporación a la gama de dos acabados diferentes (Urban y Sport).
Nuestra unidad de pruebas estaba dotada de la línea más deportiva (Sport). Este acabado incluye, entre otros, asientos deportivos con tapicería especial, volante deportivo de cuero y con costuras de contraste de color rojo, una horquilla de color rojo en la llave del coche, reposabrazos central delantero regulable horizontalmente, molduras interiores de color negro brillante y molduras decorativas de llamativo color rojo coral. Con esta línea de diseño, los instrumentos del cuadro tienen cifras y escalas específicas. La luz ambiental del habitáculo permite seleccionar entre color naranja o blanco y, además, de manera exclusiva también se ofrecen luces adicionales en la zona de la consola central y de los pies. La Línea Sport también incluye llantas de aleación ligera de 16 pulgadas con radios en forma de estrella, un recubrimiento de color negro para el tubo terminal del escape, y molduras embellecedores en los umbrales de la puerta provistos del distintivo «BMW Sport». Las barras de la parilla ovoide doble, la varilla de la entrada central de aire y los marcos de las entradas laterales, así como el listón embellecedor del paragolpes posterior son de color negro brillante. Como opción se pueden adquirir adicionalmente carcasas de los espejos retrovisores exteriores de color negro brillante y, también, llantas de aleación ligera de 17 pulgadas de dos colores.
Además de las variantes de las nuevas Líneas, se puede recurrir a otros elementos de diseño y a diversos materiales que se ofrecen opcionalmente para el nuevo BMW Serie 1. El equipamiento de serie incluye, entre otros, molduras interiores Satinsilber y asientos con tapicería de tela Move. A modo de alternativa es posible adquirir opcionalmente otras molduras interiores y asientos de cuero Dakota, que se ofrecen en dos colores. Los asientos deportivos opcionales pueden estar provistos de cualquiera de las variantes de tapicería. El cliente puede escoger entre tres colores sólidos y ocho colores metalizados.
El BMW 120d más barato lo puedes comprar por unos 30.000 €, un precio muy alto si lo comparamos con cualquiera de sus alternativas. A cambio, tienes un coche muy bien hecho que resulta muy satisfactorio cuando lo conduces (ver configurador). Entre sus posibles rivales, están el Volkswagen Golf y el Audi A3, ambos dos me parecen modelos a tener en cuenta como alternativas al BMW.
Conclusión: El BMW Serie 1 es el modelo compacto de mayor calidad que hay en el mercado. La versión Diesel de 184 CV, que ha sido objeto de esta prueba, destaca por su bajo consumo, excelentes prestaciones y buenas cualidades dinámicas. Sin duda, este nuevo Serie 1 juega en otra liga destinada a los conductores que busquen un producto de calidad en el que el precio pasa a un segundo plano.
El BMW Serie 1 es uno de los candidatos que optan a la nueva edición de "Coche del Año en Internet 2012".
Texto: Gustavo Rodríguez
Fotos: A. R. Sastre, G. Rodríguez y BMW