BMW M5 es la versión más potente y deportiva de la gama del BMW Serie 5. Ya está disponible en los concesionarios de la marca alemana con un precio de salida de 117.500 €.
A diferencia de las anteriores generaciones, incorpora un motor sobrealimentado de 560 CV y puede estar asociado a una transmisión automática de 8 velocidades u, opcionalmente, a una caja de cambios de doble embrague M-DCT.
Con suspensión y diferencial activo M
BMW M5 dispone de un sistema de suspensión activa, desarrollado especialmente para este modelo. Su concepción se basa en la experiencia adquirida de BMW M GmbH en la competición y ajustada en sus especificaciones con las pruebas llevadas a cabo en el circuito norte de Nürburgring. Además, el BMW M5 ofrece la innovadora tecnología de diferencial trasero también desarrollado por BMW M GmbH.
El diferencial activo M optimiza la estabilidad del vehículo mediante la variación del bloqueo selectivo de par entre las ruedas derecha e izquierda, gracias a un diferencial trasero compuesto de un sistema multidisco, todo de forma precisa y rápida, asegurando siempre un nivel de tracción y agarre incluso sobre superficies muy resbaladizas. El sistema también asegura un alto grado de dinamismo, seguridad y estabilidad en la aceleración en curvas, incluso bajo las condiciones más exigentes.
La tracción, como suele ser norma de la casa, es trasera. Para transmitir todo el potencial con eficacia al asfalto, el BMW M5 equipa unos neumáticos con medida 265/35 ZR 20 en el tren delantero y de 295/30 ZR 20 en el trasero, montados en llantas de aleación de 20 pulgadas de diámetro. Opcionalmente, se ofrecerán unas llantas de aleación de aluminio forjado, del mismo diámetro, pintadas en negro.
Diseño M: El rendimiento que define el diseño
Estéticamente hay muy pocas diferencias respecto al prototipo Concept M5, que se presentó en el pasado Salón del Automóvil de Shanghai 2011. El elegante y deportivo diseño de la berlina alemana ha sido especialmente modificado utilizando el lenguaje M, con todas las características específicas directamente relacionadas con un rendimiento excepcional de su propulsor y determinado por una relación directa de cada detalle con los requisitos técnicos (ver imágenes de la carrocería).
En el frontal, el faldón delantero se ha concebido para optimizar el flujo de aire y ofrecer una refrigeración precisa (ver imagen). Cuenta con tres grandes entradas de aire orientadas a la alta exigencia de refrigeración del motor y sus componentes auxiliares. La apertura de la toma de aire central corresponde a la anchura de la parrilla ovoide típica de BMW, presentando una forma de V, sobresaliendo más que las dos tomas de los extremos. Presenta un diseño de tres dimensiones y malla interior, de color negro y en panel de nido de abeja.
Los faros bi-xenón cuentan con doble proyector en cada grupo ópticos y se complementan con la luz de marcha diurna en la parte superior, un detalle que centra la mirada en la carretera, otra característica ya habitual de los modelos de BMW M GmbH. Al igual que en el nuevo BMW Serie 5, las líneas del capó que fluyen hacia la característica parrilla ovoide de BMW, en posición vertical.
En la silueta, los pasos de rueda más anchos transmiten una dosis especial de potencia, sin concesiones. La amplia distancia entre ejes y la moldura de color negro que bordea la superficie acristalada refuerzan la sensación de silueta ampliada, junto con la carrocería rebajada con la suspensión M. En las aletas delanteras, una branquia de respiración de la mecánica presenta el típico diseño de los modelos M, dividida por una barra cromada que, también, integra el indicador de dirección y que sirven de punto de partida de la línea de cintura, extendiéndose por la carrocería hasta los pilotos traseros, siendo solamente interrumpida por los tiradores de las puertas.
La parte trasera presenta el mismo estilo deportivo que la silueta y el frontal. La zaga enfatiza la anchura del vehículo a través de líneas horizontales dominantes, también en el nuevo BMW Serie 5 y que, en este concepto, se combinan con un faldón trasero específico. Un difusor integrado en el borde inferior del faldón trasero dirige los flujos de aire al final del tren de rodaje posterior.
Como todos los modelos M, el BMW M5 está equipado con dos parejas de salidas de escape, separadas por el difusor y rodeadas de pestañas aerodinámicas (ver imagen). Sobre la tapa del maletero, un discreto spoiler optimiza la aerodinámica del coche, asegurando un nivel de carga aerodinámica adicional sobre el conjunto de la carrocería a altas velocidades (ver imagen).
La gama de colores de carrocería constará de ocho posibilidades, con dos opciones metalizadas, dos sólidas y cuatro colores exclusivos de M. Además, se ofrecerá un color mate que estará integrado en el programa de personalización de BMW Individual.
Pleno lujo y deportividad en el interior
El interior del nuevo BMW M5 irradia deportividad, contando con un salpicadero, puesto de conducción y asientos deportivos propios de M. En la consola central, se disponen de tres teclas que activan las funciones del sistema M Drive, pudiendo elegir entre tres modos de funcionamiento, Efficient, Sport y Sport Plus, adaptando las características del motor a las condiciones de la conducción.
El nuevo BMW M5 puede personalizarse recurriendo a casi todos los equipos opcionales ofrecidos para el resto de versiones del nuevo BMW Serie 5, incluyendo todos los sistemas de asistencia al conductor y de servicios de BMW ConnectedDrive.
Nueva generación en BMW M: motor V8 TwinPower Turbo
El BMW M5 continúa con la nueva dimensión abierta en la dinámica de conducción de los modelos desarrollados por BMW M GmbH. El nuevo M5 es el tercer modelo, tras los BMW X5 M y X6 M que monta un motor sobrealimentado con tecnología BMW M TwinPower Turbo (ver motor).
Se trata de un bloque de aluminio de ocho cilindros en V y de altas revoluciones, de aluminio, que tiene una cilindrada de 4.395 centímetros cúbicos.
Las cifras de esta motorización son espectaculares. Desarrolla una potencia máxima de 560 CV, entre 6.000 y 7.000 revoluciones por minuto (el motor puede girar a un máximo de 7.200 RPM) y un par motor máximo de 680 Nm, que se encuentra disponible desde tan sólo 1.500 revoluciones por minuto y hasta 5.750 revoluciones por minuto.
Esta elevada cifra de potencia y de par motor que, con respecto al M5 saliente, es un 10 y un 30 por ciento mayor, respecttivamente, se ha conseguido gracias a la combinación de las más avanzadas tecnologías presentes en el banco de órganos de BMW, desde la regulación continua de las válvulas en admisión VALVETRONIC y DOBLE VANOS, hasta la inyección directa de gasolina HPI con inyectores que soplan a una presión máxima de 200 bar y la sobrealimentación mediante dos turbocompresores de doble entrada Twin Scroll.
Además, contiene el paquete de soluciones tecnológicas de BMW EfficientDynamics, como el sistema de arranque y parada automático Auto Start Stop, evitando el consumo innecesario de combustible en ralentí, lo que significa que, con respecto al anterior BMW M5, el consumo de combustible y los niveles de emisiones se han reducido en más de un 30 por ciento, con un consumo medio de sólo 9,9 litros cada 100 kilómetros y unas emisiones de CO2 de 232 gr/km.
De serie, el nuevo BMW M5 está asociado a una transmisión automática de 8 velocidades.
Las prestaciones del BMW M5 son sobresalientes. Acelera, de cero a 100 km/h, en tan sólo 4,4 segundos y alcanza los 200 km/h en 13 segundos.
Su velocidad máxima, limitada electrónicamente, es de 250 km/h, si bien mediante un paquete M Driver opcional se puede eliminar dicho limitador, para que de esta forma, alcance los 305 km/h de velocidad punta.
Igualmente, estará a disposición de los clientes una caja de cambios de doble embrague y siete velocidades M-DCT con función Drivelogic, adaptada específicamente al rendimiento del nuevo motor V8, ofreciendo unos cambios entre relaciones extremadamente rápidos con una selección extraordinariamente precisa.
Estra transmisión dispone de hasta seis programas de funcionamiento: tres programas para una conducción cómoda y eficiente (D1, D2 y D3 ) y tres programas más para una conducción puramente deportiva (S1, S2 y S3), pudiendo manejarse de forma manual desde las levas instaladas tras el volante o de forma totalmente automática.
Texto: Gustavo Rodríguez y Francisco Romero
