Aprovechando el restyling del Audi A3, la marca alemana renueva la versión más deportiva; el Audi S3. Ahora la versión de cinco puertas (Sportback) también cuenta con su particular versión S3 (Más información). El Audi S3 Gama 2008 está disponible desde 39.100 € hasta 41.740 € (este ultimo con cambio S tronic).
El propulsor del Audi S3 no presenta variaciones. El 2.0 TFSI de 265 CV (195 kW) tiene un par motor de 350 Nm, disponibles de forma constante entre las 2.500 y las 5.000 rpm (ver gráfico). Este motor turbo de inyección directa de dos litros es capaz de impulsar al Audi S3 en 5,7 segundos a los 100 km/h. La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h. Con un consumo medio de 8,5 litros de carburante a los 100 km.
En comparación con el Audi A3, el dos litros del Audi S3 Gama 2008 se presenta en una versión más desarrollada. El turbo con una rueda del compresor y de la turbina más grande genera hasta 1,2 bar de presión de carga relativa. El radiador del aire de sobrealimentación perfeccionado reduce la temperatura del aire comprimido de forma significativa y aumenta así la masa de aire necesaria para la combustión.
En el interior del motor TFSI trabajan pistones con pernos más resistentes; bielas reforzadas y con nuevos soportes que transmiten las fuerzas al cigüeñal. El bloque de cilindros se ha visto reforzado, mientras que la culata se ha fabricado en fundición de una nueva aleación altamente resistente al calor. Los tiempos de gestión del árbol de levas de escape se han adaptado a la potencia aumentada, y las boquillas inyectoras de alta presión presentan un sección más grande. Con toda esta técnica concentrada, el turbo de alto rendimiento pesa sólo 152 kg, menos que cualquier propulsor comparable de la competencia directa.
El tren de rodaje deportivo rebaja la altura de la carrocería 25 milímetros e incorpora componentes de construcción ligera de aluminio. Sus pinzas de freno de color negro intervienen en los frenos de discos de 17 ó 18 pulgadas.
Regulación electrónica de los amortiguadores
El Audi S3 Gama 2008 puede incorporar Opcionalmente la regulación electrónica de los amortiguadores Audi magnetic ride, que pone punto final al conflicto entre confort y dinamismo.
Por los pistones de los amortiguadores circula un aceite de hidrocarburo sintético en el que se encuentran partículas magnéticas microscópicas de entre tres y diez micrómetros (milésima parte de un milímetro) de tamaño del grano. Al aplicar un determinado voltaje en una bobina se crea un campo magnético en el que se modifica la orientación de las partículas. Se disponen en sentido transversal a la dirección de la corriente de aceite y reducen así su flujo a través de los canales de los pistones. De este modo se modifica en cuestión de milisegundos la línea característica de la amortiguación.
La unidad de gestión del sistema analiza el estado permanentemente de la calzada y el estilo del conductor y ajusta el modo de funcionamiento de forma adaptativa. Pulsando un botón, el conductor puede alternar entre el modo normal y el modo deportivo. En la posición normal, con un caudal de aceite elevado, el Audi S3 Gama 2008 ruedan de forma equilibrada y confortable. En el modo deportivo, con menor viscosidad, el vehículo se mantiene estrechamente adherido a la calzada, con lo que se eliminan los movimientos de cabeceo. La respuesta de la dirección se vuelve aún más precisa, y el apoyo selectivo de las ruedas confiere aún más neutralidad al comportamiento autodireccional.
El tren de rodaje que el Audi A3 equipa de serie ha sido perfeccionado para su implementación en el Audi S3 Sportback. Los cojinetes giratorios y los brazos transversales de aluminio reducen las masas no suspendidas para conseguir un mejor dinamismo. Los soportes del tren de rodaje más rígidos y la línea característica de la dirección electromecánica aún más deportiva aumentan la precisión.
Dinámicamente es un coche muy equilibrado, que mantiene unos niveles de confort muy elevados y que ostenta una eficacia excelente. También es un coche fácil de conducir, incluso cuando se circula rápido. Por su parte, la dirección tiene un tacto agradable y comunica perfectamente todo lo que ocurre en el asfalto. Si fuera más directa en su respuesta, sería perfecta.
Como en la anterior generación, la tracción integral quattro entra dentro del equipamiento de serie en todos los modelos S de Audi. Un embrague multidisco de accionamiento hidráulico y control electrónico, ubicado en la parte trasera del vehículo en beneficio del equilibrio del peso, distribuye el par en función de la demanda y garantiza así el máximo agarre en todo momento y la máxima seguridad en marcha. Todos los componentes de la cadena de transmisión han sido reforzados.
Con cambio de doble embrague
De serie incorpora un cambio manual de seis velocidades. Pudimos probarlo durante la toma de contacto. Su tacto es agradable y tiene solidez en su guiado, pero cuando lo manejamos rápido aumenta su dureza y tiende a "engancharse" cuando lo manejamos en diagonal. Opcionalmente puede adoptar el cambio de doble embrague (denominado comercialmente como "S tronic"). Se puede manejar de forma manual a través de la palanca de selección o de las levas de cambio ubicadas en el volante; dispone además de dos modos completamente automáticos, denominados D (Drive) y S (Sport). En el modo N, la gestión de la caja de cambios se encarga de que el motor gire, siempre que sea posible, del modo más económico a bajas revoluciones.
El S tronic, de construcción ultracompacta, puede cambiar sus marchas sin interrupción de la fuerza motriz con increíble rapidez. El denominado “mechatronic”, un módulo compuesto por un procesador central y complejos actuadores hidráulicos, gestiona su trabajo. La carcasa del S tronic está compuesta por dos estructuras de transmisión que integran dos embragues; el primero se compone de un grupo de engranajes para las marchas impares, mientras que el segundo integra los engranajes para las marchas pares. Ambos embragues se encuentran situados uno detrás del otro, y accionan dos árboles primarios en un eje conjunto. El embrague 1 está unido a un árbol macizo que acciona los engranajes de la estructura 1, el embrague 2 está unido a un árbol hueco, que encapsula al árbol macizo, y activa los engranajes de la estructura 2.
Ambas estructuras se encuentran continuamente activas, pero solo una de ellas es impulsada por el giro del motor. Por ejemplo, cuando el conductor acelera en tercera, que se encuentra en la primera estructura, la cuarta ya está engranada en la segunda estructura. El proceso de cambio de una a otra tiene lugar cuando cambian los embragues, abriendo el embrague 1 y cerrando el embrague 2. Este proceso se produce de un modo tan cómodo y fluido que el conductor apenas se da cuenta de la acción. Tarda sólo unas centésimas de segundo y se completa sin interrupción perceptible de la fuerza motriz.
Por prestaciones y concepción, el Audi S3 es similar al SEAT León Cupra, Renault Megane RS, Opel Astra OPC y Volkswagen Golf R32.
Sus cambios estéticos
Al igual que en el Audi A3, la imagen del Audi S3 también ha sufrido modificaciones, diferenciándose claramente por una serie de pronunciadas líneas, como por ejemplo en la parrilla del radiador, en los parachoques y en el alerón del borde del techo, y por los retrovisores exteriores en óptica de aluminio. En el interior, el conductor y el acompañante podrán disfrutar de asientos deportivos con tapizados textiles, de Alcantara combinado con cuero y de cuero.
Opcionalmente se pueden adquirir asientos anatómicos de Audi exclusive. Los pedales de aluminio, tres tipos diferentes de inserciones decorativas y el revestimiento interior del techo en negro o plata le confieren un distinguido aspecto deportivo. Un climatizador automático de confort, un sistema de alarma antirrobo y faros xenón plus con luz de marcha diurna en tecnología LED completan el equipamiento de serie.
Se podrá elegir entre siete colores y tapizados diferentes y tres inserciones. El climatizador automático de confort, la alarma antirrobo y los faros de xenón plus completan el amplio equipamiento de serie.
Texto: Gustavo Rodríguez